Claudia Sheinbaum y su ambicioso plan: ¿Podrá alcanzar los objetivos de energías renovables para 2030?

El ambicioso plan de Claudia Sheinbaum de impulsar la producción de energía renovable en México se enfrenta a grandes retos políticos y técnicos, según afirman los analistas. La nueva presidenta se ha comprometido a ampliar la energía renovable hasta el 45% de la generación total de electricidad para finales de la década, lo que contrasta con el 24% de 2022.

Retos técnicos y políticos

Uno de los retos es la red obsoleta, ya que años de falta de inversión han provocado el envejecimiento de la infraestructura. Alejandro Schtulmann, presidente y jefe de investigación de la consultora de riesgo EMPRA, considera el plan una quimera y destaca la escasa inversión en las empresas energéticas estatales, especialmente en transmisión y distribución.

Además, el predecesor de Sheinbaum, Andrés Manuel López Obrador, fue hostil con las empresas privadas de energías renovables y prefirió invertir en la petrolera estatal. La actual administración también está evaluando la disolución de sus reguladores independientes, lo que crea inseguridad jurídica para los inversores.

Requerimientos económicos y de infraestructura

Alcanzar el objetivo de Sheinbaum para 2030 requeriría hasta 40 gigavatios de nueva capacidad en la red, o más de 6 gigavatios al año. Sin embargo, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) apenas ha podido añadir los 3,3 gigavatios de capacidad anuales necesarios para satisfacer la creciente demanda.

Incluyendo las inversiones necesarias en capacidad de transmisión y distribución, el costo podría alcanzar los 50 mil millones de dólares, convirtiéndola en la mayor construcción de infraestructura energética en un mandato presidencial en la historia de México.

La postura de Sheinbaum y la CFE

Sheinbaum mantiene la visión de su predecesor de que las empresas estatales sean los principales actores del sector, con la CFE controlando el 54% de la generación de energía de México.

En abril, Sheinbaum anunció un plan para invertir 13 mil 600 millones de dólares en nuevos proyectos de generación de energía, incluyendo gas, eólica, solar e hidroeléctrica, así como miles de kilómetros de nuevas líneas de transmisión.

El camino hacia las emisiones cero netas

El objetivo de Sheinbaum para 2030 no es suficiente para que México alcance las emisiones cero netas en 2050. Para ello, México necesitaría cerrar todas las centrales eléctricas de carbón y petróleo, y reducir su consumo de gas natural en más del 50%.

Sin embargo, México no tiene un objetivo de emisiones cero netas. En el marco del Acuerdo de París, pretende reducir sus emisiones en un 35% respecto a los niveles actuales antes de 2030.

Conclusión

El ambicioso plan de energías renovables de Claudia Sheinbaum se enfrenta a importantes retos técnicos, políticos y económicos. Aunque ha anunciado inversiones significativas, queda por ver si podrá superar las barreras y alcanzar sus objetivos para 2030.

El éxito de su plan no solo es crucial para el futuro energético de México, sino también para su compromiso con la mitigación del cambio climático.