La mayor productora mundial de aceite denuncia fraude en los refinados vendidos en España como "de oliva"
Dcoop, la mayor productora de aceites de oliva a nivel mundial, denuncia la existencia de un fraude en los aceites refinados que se comercializan bajo la etiqueta de "oliva", pero que en realidad serían el resultado de una mezcla de aceites de otros orígenes y peores calidades.
Indicios de fraude
El presidente de la cooperativa andaluza, Antonio Luque, asegura tener "indicios" de que estas prácticas se llevan a cabo, e incluso cuenta con "nombres y apellidos" de quienes las realizan. Sin embargo, no dispone de "pruebas" que le permitan llevar el caso ante la justicia.
Aceites refinados y de peor calidad
Los aceites refinados se obtienen a partir del aceite lampante, de menor calidad y no apto para el consumo directo. Por ello, se somete a un proceso industrial para reducir su acidez, malos olores o color inadecuado. En teoría, los aceites refinados de oliva deben ser siempre de origen olivar.
Sin embargo, Luque denuncia que en época de altos precios de la materia prima, "el aceite refinado ha estado más barato que el lampante", lo que indica que se están mezclando con aceites más baratos y de distintos orígenes, como el de girasol.
Falta de actuación de las administraciones
El presidente de Dcoop critica la falta de actuación de las administraciones para atajar este presunto fraude. También carga contra el sistema de catas, que confirma la calidad del aceite de oliva pero no desgrana su composición.
Bajada de precios del aceite de oliva
Por otro lado, Dcoop prevé que los precios del aceite de oliva continúen bajando, tras una caída de cerca del 20% en el último mes. El virgen extra está a punto de bajar de los seis euros el kilo, algo inédito en el último año y medio.
Luque anticipa otra bajada antes de fin de año, sin descartar que se baje de la barrera de los cinco euros. Esta bajada debería llegar a los lineales a finales de diciembre y principios de enero.
Preocupación por las políticas arancelarias de EEUU
Otro punto de preocupación es la política arancelaria del futuro Gobierno de Estados Unidos, que amenaza con volver a castigar productos europeos como el aceite de oliva. Luque muestra su intranquilidad no por las medidas de la administración Biden, sino por la respuesta de Europa.
"Me preocupan los míos: Europa y el Gobierno español. Debe ser una batalla europea, de defender los intereses. Europa se tiene que plantear si quiere ser un productor de alimentos y reaccionar a tiempo. Antes de que EE. UU. ponga aranceles, debe responder."
Fuente: El País