Jalisco rechaza el programa IMSS-Bienestar y pierde 218 millones de pesos

El estado de Jalisco se ha sumado a la lista de entidades que han decidido no adherirse al programa IMSS-Bienestar. Esta decisión ha generado una reducción de 218 millones de pesos en los recursos federales destinados a salud, según un análisis realizado por el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados.

Impacto a nivel nacional

A nivel nacional, las 23 entidades que firmaron el convenio con el IMSS-Bienestar enfrentarán recortes mucho más severos, con una disminución total de 52 mil 965 millones de pesos, lo que equivale a una reducción diaria de 145,1 millones de pesos.

Contexto del programa IMSS-Bienestar

El programa IMSS-Bienestar fue creado el 31 de agosto de 2022 como un organismo público descentralizado con el objetivo de brindar atención médica gratuita a personas sin seguridad social. Antes de su implementación, los estados recibían y administraban directamente los recursos del Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud (FASSA) para operar sus hospitales y centros de salud.

Con la centralización en el IMSS-Bienestar, los estados que aceptaron el esquema han cedido el control de sus sistemas estatales de salud al gobierno federal, un punto que generó desacuerdo en entidades como Jalisco, donde las autoridades estatales prefirieron mantener la gestión propia de los servicios.

Situación de Jalisco

En el caso de Jalisco, la disminución de 218 millones de pesos representa una caída del 8,2% en términos reales respecto a 2024. Al rechazar la adhesión al programa, el estado evitó un recorte de mayor impacto, pero también asume la responsabilidad de financiar su sistema de salud con menos apoyo federal.

Esto implica el reto de garantizar la atención médica a personas sin seguridad social y sostener la operatividad de los servicios estatales con recursos propios. Actualmente, el sistema de salud de Jalisco atiende a más de 2,5 millones de personas sin afiliación al IMSS o ISSSTE, por lo que la reducción de recursos podría traducirse en menor capacidad de contratación de personal médico, menor disponibilidad de medicamentos o retrasos en la atención hospitalaria.

Perspectiva de las autoridades estatales

Las autoridades estatales de Jalisco han defendido la decisión argumentando que el modelo del IMSS-Bienestar no garantiza mejoras sustanciales en la atención médica y que, en cambio, el estado puede administrar de manera más eficiente los recursos sin necesidad de ceder el control al gobierno federal.

Sin embargo, el recorte de 218 millones de pesos representa un desafío para el sistema de salud de Jalisco, que deberá buscar estrategias para compensar esta reducción sin afectar la calidad de los servicios.