La CNMC somete la OPA del BBVA al Sabadell a un análisis más estricto y adelanta la intervención del Gobierno

La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha decidido someter la Oferta Pública de Adquisición (OPA) del BBVA sobre el Banco Sabadell a una segunda fase de análisis, lo que prolongará los plazos de la operación más allá de lo previsto por el BBVA.

¿Qué implica esta decisión?

Esta decisión implica que la CNMC recabará la opinión de distintos actores sociales, como sindicatos, patronales, competidores o asociaciones de usuarios, y dará un mayor protagonismo al Gobierno en el proceso. El Ejecutivo, que se ha opuesto frontalmente a la adquisición, podrá endurecer las condiciones que imponga la CNMC para autorizar la transacción.

¿Qué motivos han llevado a la CNMC a tomar esta decisión?

La CNMC ha observado problemas de competencia en la transacción. Al pasar su análisis a la segunda fase, podrá recabar más información y evaluar con mayor detalle los posibles efectos de la operación en el mercado bancario.

¿Qué impacto tendrá esta decisión en el proceso de la OPA?

La decisión de la CNMC prolongará los plazos de la operación, que probablemente no se resolverá hasta el verano de 2025. Además, la intervención del Gobierno podría endurecer las condiciones de la OPA y dificultar su aprobación.

¿Qué consecuencias puede tener la OPA para el sector bancario español?

La OPA del BBVA sobre el Sabadell es una de las operaciones de concentración bancaria más importantes de los últimos años en España. Si se aprueba, crearía un gigante bancario con una cuota de mercado significativa, lo que podría tener implicaciones para la competencia y los consumidores.

Según el analista Álvaro Bayón del diario El País, la decisión de la CNMC supone un duro golpe para los planes del BBVA y podría hacer descarrilar la operación. Cabe destacar que es habitual que la CNMC someta a una segunda fase de análisis las ofertas hostiles, como es el caso de la OPA del BBVA sobre el Sabadell.

La decisión de la CNMC también da un mayor protagonismo al Gobierno en el proceso de la OPA. El Ejecutivo, que se ha opuesto frontalmente a la adquisición, podrá endurecer las condiciones que imponga la CNMC para autorizar la transacción.

La fase dos implica el paso de la operación a una fase tres. En esta, la CNMC da cuenta al Ministerio de Economía de las condiciones planteadas. Y el departamento que dirige Carlos Cuerpo deberá avalarlas o endurecerlas en un informe que deberá aprobar el Consejo de Ministros.