El Parlamento Europeo aprueba una directiva para facilitar la reparación de aparatos electrónicos

El Parlamento Europeo ha dado un paso importante en la lucha contra la cultura del usar y tirar al aprobar una nueva directiva que obligará a los fabricantes a proporcionar servicios de reparación asequibles para una amplia gama de productos, incluidos electrodomésticos, dispositivos electrónicos y medios de transporte que funcionen con baterías.

¿Por qué es necesaria esta directiva?

Cada año, la sustitución prematura de aparatos electrónicos supone un gasto de 12.000 millones de euros, produce 261 millones de toneladas de CO2 y genera 35 millones de toneladas de residuos. Esta directiva tiene como objetivo reducir estas cifras fomentando la reparación en lugar de la sustitución.

¿Qué productos están cubiertos por la directiva?

La directiva se aplica a una amplia gama de productos, entre los que se incluyen:

¿Qué obligaciones impone la directiva a los fabricantes?

La directiva obliga a los fabricantes a:

¿Cómo se implementará la directiva?

Los Estados miembros tienen dos años para incorporar la directiva a su legislación nacional. Una vez implementada, la directiva será de obligado cumplimiento para todos los fabricantes que vendan productos en la UE.

¿Cuáles son los posibles beneficios de la directiva?

La directiva tiene varios beneficios potenciales, entre los que se incluyen:

¿Cuáles son los posibles retos de la directiva?

La directiva también presenta algunos retos potenciales, entre los que se incluyen:

A pesar de estos retos, la directiva es un paso positivo hacia un futuro más sostenible y circular. Si se implementa y se aplica adecuadamente, la directiva podría tener un impacto significativo en la forma en que consumimos y desechamos los aparatos electrónicos.