DKV abandona Muface ante la imposibilidad de ofrecer un servicio sanitario de calidad

La aseguradora DKV ha anunciado que no participará en el próximo concurso de Muface, el mutualismo de los funcionarios públicos, debido a la infrafinanciación que sufre este servicio. Fernando Campos, consejero delegado de DKV, ha explicado que, si la compañía hubiera acudido al concurso con las condiciones actuales, habría registrado unas pérdidas de 77 millones de euros en los dos años de duración del contrato.

Un servicio cada vez más caro

La infrafinanciación de Muface es un problema crónico que se ha agravado en los últimos años, especialmente en 2022, cuando se dispararon los precios en toda la economía. Además, según Campos, “cada vez hay una mayor demanda de servicios sanitarios, más consultas, más diagnósticos... lo que están encareciendo mucho dar este servicio”.

El envejecimiento del colectivo de mutualistas también está contribuyendo al aumento de los costes, ya que este grupo requiere más atención sanitaria.

Pérdidas millonarias

De acuerdo con los cálculos realizados por DKV, tras analizar el último pliego de condiciones presentado para el concurso de Muface, si se hubieran decidido a participar, habrían registrado unas pérdidas de 77 millones de euros en los dos años del contrato. “Llevábamos mucho tiempo advirtiendo de que hacía falta una subida en las primas del 40%”, ha explicado Campos. “Pero no, es que si vamos al concurso de Muface en las condiciones actuales entramos en pérdidas”.

DKV no es la única aseguradora que ha abandonado Muface. Adeslas y Asisa también han tomado la misma decisión. El Ministerio de Función Pública está preparando una nueva licitación exprés, con una mejora económica, para tratar de atraer a las compañías. Sin embargo, Campos no está seguro de que esta mejora sea suficiente para que DKV reconsidere su postura.

1,49 millones de funcionarios afectados

La decisión de DKV, Adeslas y Asisa afectará a 1,49 millones de funcionarios que actualmente reciben asistencia sanitaria a través de Muface. Estos funcionarios tendrán que decidir si cambian a la sanidad pública o contratan un seguro privado.

El 72% de los funcionarios que están cubiertos por Muface optan por la sanidad concertada. En 2024, un 34% optaron por Adeslas, un 25% por Asisa y un 13,2% por DKV. El restante 28% optó por la sanidad pública.

Conclusión

La decisión de DKV de abandonar Muface es un duro golpe para este mutualismo. La infrafinanciación y el aumento de los costes están poniendo en peligro la sostenibilidad del servicio sanitario que reciben los funcionarios públicos. El Gobierno debe tomar medidas urgentes para resolver este problema y garantizar que los funcionarios puedan seguir recibiendo una atención sanitaria de calidad.