Las Islas Malvinas: un territorio disputado con una economía próspera

Las Islas Malvinas, un territorio disputado que prospera económicamente

En las últimas cuatro décadas, las Islas Malvinas han experimentado un notable desarrollo económico, duplicando su población y quintuplicando sus ingresos. El conflicto bélico con el Reino Unido en 1982 marcó un punto de inflexión para el archipiélago, que venía sufriendo un deterioro social y económico. Desde entonces, la autorización de Londres para cobrar derechos de pesca en las aguas del archipiélago en 1986 impulsó el crecimiento económico. El Producto Interno Bruto (PIB) per cápita en las islas es similar al de países desarrollados como Suiza o Noruega, ubicándose en unos US$103.000. Las autoridades de las islas se reconocieron en 2018 con el quinto PBI del mundo. La exportación de lana y el crecimiento del turismo también han contribuido al desarrollo económico. Actualmente, la población de las islas es de 3662 habitantes, de los cuales más de la mitad son nacidos en el exterior. El sector pesquero continúa siendo el principal motor de la economía, generando el 64% del PIB en 2018. La educación es gratuita para todos los habitantes hasta el nivel de educación superior, y el gobierno local premia a los mejores promedios para cursar carreras de grado en el Reino Unido. El 99% de la población califica con un 8 en una escala de 8 a 10 su satisfacción de calidad de vida.

Impacto de la guerra de las Malvinas

La guerra de las Malvinas llevó a Reino Unido a prestar atención y apreciar a este remoto territorio. Los isleños afirman que antes de 1982, Reino Unido intentaba venderlos a la Argentina. La guerra les permitió tomar el control de su futuro y asegurarse de que toda ganancia generada permaneciera en las islas. El conflicto bélico también marcó un cambio en la conformación social, con la inmigración y la posibilidad de trabajo que brinda la economía local.

Situación actual

Actualmente, la inflación en la pequeña pero pujante economía isleña alcanzó un pico del 3% en 2020. El empleo público sigue siendo la mayor fuente genuina de trabajo, con 663 empleados por el gobierno isleño. Otros sectores importantes empleadores son la construcción, la agricultura y el emprendimiento. Una nueva obra de infraestructura, la construcción de un nuevo puerto, marcará el crecimiento del empleo y la incorporación de más empleados provenientes de otros países.