La desaparición del FONDEN agrava la vulnerabilidad ante desastres naturales
La desaparición del Fideicomiso del Fondo de Desastres Naturales (FONDEN) en julio de 2021 ha dejado a México con un presupuesto 45% menor para enfrentar los estragos causados por sismos y huracanes de gran magnitud.
El costo de los desastres naturales
Antes del cierre del fideicomiso, existía una bolsa acumulada superior a los 33 mil millones de pesos. Actualmente, solo se cuenta con una partida presupuestaria de 17 mil 984 millones de pesos, que se transfiere a dependencias de protección civil solo después de una declaración de desastre.
Según Jorge Cano, coordinador del programa de gasto público de México Evalúa, la desaparición del FONDEN sitúa a la población en una posición más vulnerable ante eventos catastróficos.
Dependencia de los diputados
Diego Díaz Pérez, coordinador de finanzas públicas del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), destaca que la asignación de recursos para desastres naturales ahora depende de los diputados, quienes cada año aprueban la partida presupuestaria.
Esto implica que la atención a emergencias queda sujeta a las prioridades del gobierno, lo que podría comprometer la respuesta oportuna ante desastres.
Consecuencias de la desaparición del FONDEN
- Reducción del 45% en el presupuesto para desastres naturales.
- Vulnerabilidad incrementada ante eventos catastróficos.
- Dependencia de asignaciones presupuestarias anuales, sujetas a prioridades gubernamentales.
Llamado a la acción
Expertos advierten sobre la necesidad de contar con un mecanismo de financiamiento sólido para enfrentar desastres naturales. Sugieren:
- Restablecer el FONDEN o crear un fideicomiso similar.
- Incrementar la partida presupuestaria para desastres.
- Explorar mecanismos de seguros y bonos catastróficos para mitigar riesgos financieros.
La atención oportuna y eficaz a los desastres naturales es crucial para salvaguardar la vida, los bienes y la economía del país. Es imperativo fortalecer las capacidades de respuesta y garantizar los recursos necesarios para proteger a la población y reducir las consecuencias de estos eventos adversos.