EE. UU. expresa preocupaciones por barreras comerciales en México tras liberación arancelaria
Tras el reciente anuncio de medidas arancelarias, el gobierno de los Estados Unidos está expresando su preocupación por las barreras comerciales que sus empresas están enfrentando al intentar exportar productos a México. Según el Informe de Estimación Nacional de Comercio 2025, las empresas estadounidenses están lidiando con cambios repentinos en las reglas, restricciones logísticas y regulaciones complicadas, lo que dificulta el comercio bilateral.

Cambios Regulatorios Impredecibles
Una de las principales quejas de los Estados Unidos es la falta de aviso adecuado cuando México modifica sus regulaciones de importación. Según el informe, las empresas estadounidenses a menudo reciben solo dos semanas de anticipación antes de que las nuevas reglas entren en vigor, lo que les da muy poco tiempo para adaptarse. Además, el gobierno mexicano a veces otorga solo una semana para que los exportadores comenten sobre los cambios propuestos. Esta situación, como señala Fernanda Murillo de Grupo Milenio, está generando incertidumbre y dificultando la planificación de las operaciones comerciales.
Aplicación Desigual de las Normas
Otro desafío significativo es la aplicación inconsistente de las regulaciones en los diferentes puntos fronterizos de México. Las normas de etiquetado de productos y otras regulaciones no se aplican de manera uniforme en todo el país, lo que provoca confusión y complica aún más las operaciones comerciales. Esta falta de uniformidad, según el informe, está afectando la eficiencia de las cadenas de suministro y aumentando los costos para las empresas estadounidenses.

Restricciones Portuarias
El gobierno de los Estados Unidos también está destacando las restricciones en los puertos mexicanos como un obstáculo importante para el comercio. Ciertos productos solo pueden importarse a través de puertos específicos, lo que dificulta y encarece la organización del transporte. Esta limitación está impactando particularmente a las pequeñas y medianas empresas (PyMEs) estadounidenses que venden productos en línea. La situación portuaria se ve agravada por una regla que limita a los agentes aduanales a operar en solo cuatro puertos, lo que dificulta aún más el despacho de mercancías en otros lugares. Estados Unidos está pidiendo que se modifique esta regla para permitir que los agentes aduanales operen en cualquier puerto, facilitando así el comercio entre ambas naciones.
Pagos para Envíos Expresos y Nuevas Regulaciones
A pesar de lo estipulado en el T-MEC, México aún no ha implementado una opción de pago periódico para envíos rápidos, lo que está generando retrasos y costos adicionales para las empresas estadounidenses. Además, una nueva regla exige que los servicios de entrega recopilen y almacenen el número de identificación fiscal del destinatario para aplicar procedimientos simplificados a productos de menos de 2,500 dólares. Esta medida, según el informe, está complicando las cosas para las empresas estadounidenses que antes podían realizar este proceso de manera más sencilla.
Barreras en el Sector de Dispositivos Médicos y Farmacéuticos
La industria de dispositivos médicos, suministros y productos farmacéuticos sigue enfrentando retrasos significativos, que oscilan entre 18 y 24 meses, en la adjudicación de registros sanitarios y solicitudes de permisos de importación. El retraso regulatorio sigue siendo una barrera importante para ingresar al mercado mexicano. Grupo Milenio reporta que aunque ha habido mejoras menores, se necesitan cambios estructurales adicionales para facilitar el registro en México.
Glifosato y Pesticidas
La Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) ha rechazado los permisos de importación para productos químicos que contienen glifosato. Estados Unidos está presionando a México para que otorgue estos permisos, argumentando que el glifosato sigue estando registrado para su uso. Las empresas estadounidenses también están informando retrasos significativos en la aprobación de registros y comercialización por parte de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) para ciertos pesticidas y productos químicos agrícolas. Algunas empresas han perdido sus registros y la capacidad de importar estos productos debido a la falta de renovación por parte de COFEPRIS.
Implicaciones y Próximos Pasos
Las preocupaciones expresadas por los Estados Unidos reflejan la necesidad de una mayor transparencia y predictibilidad en las regulaciones comerciales de México. Facilitar el comercio bilateral no solo beneficiará a las empresas estadounidenses, sino que también impulsará el crecimiento económico en ambos países. Se espera que ambos gobiernos trabajen juntos para abordar estas barreras y crear un entorno comercial más favorable y equitativo.
Según el Grupo Milenio, Estados Unidos continuará monitoreando de cerca las políticas comerciales de México y presionando para que se realicen cambios que faciliten el comercio. La resolución de estas barreras comerciales será fundamental para fortalecer la relación económica entre Estados Unidos y México en los próximos años.