Pronovias prevé cerrar 2024 con pérdidas y espera recuperarse en 2025
La empresa de moda nupcial afronta un proceso de transformación que incluye recortes de plantilla y un replanteamiento de su modelo de negocio.
Las cuentas anuales de Pronovias en 2023 reflejaron una pérdida consolidada de 128,5 millones de euros, superior a los 98 millones que comunicó la compañía en mayo del año pasado. Esta diferencia se explica en parte por unos deterioros de casi 42 millones de euros vinculados a una sobrevaloración de activos intangibles realizada en 2017, cuando la empresa cambió de propietario.
Inicialmente, Pronovias había previsto obtener un resultado positivo en 2024, pero la empresa ha explicado que 2024 ha sido un año de transformación, en el que se han acometido medidas de reorganización del modelo de negocio de acuerdo con el nuevo plan estratégico 2025-2027.
Entre estas medidas, destaca la aprobación de un ERE que ha afectado a 64 trabajadores de las oficinas centrales de Pronovias. La compañía también ha registrado un retroceso en su facturación, que vincula al proceso de transformación, y que estaba contemplado en la activación del nuevo plan estratégico, que arrancará en 2025.
Pronovias confía en entrar en 2025 "con las bases de un modelo de negocio más sólido y más apropiado a las características actuales del mercado" y en regresar a la senda de la rentabilidad tras conseguir un ebitda positivo de 2,6 millones de euros en 2023 y volver a disponer de fondos propios positivos, aunque de apenas un millón al cierre del año pasado.
El plan estratégico de Pronovias hasta 2027 contempla oportunidades de crecimiento en nuevos mercados, así como medidas de eficiencia en los costes de producción, adecuación de las inversiones previstas y renovación de la financiación del circulante del grupo.
El apoyo financiero del máximo accionista, Bain Capital, será clave para la recuperación de Pronovias. La compañía reconoce en sus estados contables la "incertidumbre material" sobre su capacidad para liquidar sus pasivos, pero cuenta con el respaldo de Bain y del otro socio minoritario, MV Credit.
En 2023, Bain y MV Credit adquirieron una deuda financiera de 188,3 millones de euros que capitalizaron, dando oxígeno a Pronovias en forma de fondos propios y reduciendo su pasivo. Según la compañía, esta se redujo un 50% el año pasado hasta los 140 millones de euros, de los que solo 19 son con terceros.
En 2024, los propietarios aprobaron un calendario de aportaciones adicionales. Por una parte, inyectaron 28 millones de euros entre mayo y octubre. Además, convirtieron en participativo un tramo de 39 millones de euros del crédito que el fondo concedió a Pronovias tras la toma de control.
Pronovias ha indicado que, por el momento, no hay ninguna operación concretada de nuevas aportaciones, pero que la propiedad del grupo está volcada y comprometida con el plan de transformación y el nuevo plan estratégico de la compañía.