Los municipios españoles acumulan ahorros récord y casi duplican su deuda

Los ayuntamientos españoles tienen más de 38.000 millones de euros guardados en efectivo y depósitos

Los municipios españoles acumulan un nuevo récord de ahorros, con más de 38.698 millones de euros en efectivo y depósitos a finales de 2023, según datos del Banco de España. Esta cantidad supone un 36% más que antes de la pandemia y más del triple que en 2011.

Este aumento de los ahorros municipales se debe a años de estricto control presupuestario, que ha impedido a los ayuntamientos gastar libremente sus ingresos. Sin embargo, esta acumulación de fondos también plantea interrogantes sobre su uso eficiente.

El control del gasto

La Gran Recesión de 2011 llevó a una reforma de la Constitución española para introducir el principio de estabilidad financiera. Esta reforma impuso a las Administraciones públicas, incluidas las corporaciones locales, la obligación de equilibrar sus presupuestos y controlar el gasto.

Los ayuntamientos están sujetos a la regla de gasto, que limita el crecimiento de sus desembolsos. También deben diseñar sus cuentas en equilibrio, es decir, los gastos previstos no pueden superar los ingresos.

El cumplimiento de estas normas ha permitido a los municipios reducir su deuda, que en diciembre de 2023 se situaba en 23.309 millones de euros, el 1,5% del PIB. Este porcentaje es el más bajo desde 2004.

El uso de los ahorros

Los ahorros municipales pueden utilizarse para reducir la deuda, pero muchos ayuntamientos no tienen pasivo que amortizar. Desde 2014, se les permite destinar parte de sus ahorros a inversiones financieramente sostenibles, que no afectan a los objetivos de estabilidad.

Sin embargo, incorporar los ahorros en los presupuestos a lo largo del ejercicio puede causar desajustes. Esto se debe a que deben contabilizarse como gasto, lo que puede llevar a incurrir en déficit y a la necesidad de aprobar un plan económico financiero.

Expertos consideran que los ahorros municipales podrían utilizarse para:

El debate sobre el uso de los ahorros municipales continuará, ya que los ayuntamientos buscan equilibrar la disciplina fiscal con las necesidades de inversión y servicios públicos.