Las autoridades españolas han logrado incautar 13 toneladas de cocaína en el puerto de Algeciras, Cádiz. Este alijo, oculto entre un cargamento de plátanos, representa un nuevo récord en cuanto a incautaciones de esta sustancia en el país.

Un cargamento sin precedentes

La droga fue hallada en un contenedor proveniente de Ecuador, conocido por ser una importante plataforma de salida de cocaína en los últimos años. El destino del cargamento era una empresa con sede en Alicante.

Esta incautación supera el récord anterior de 9,5 toneladas intervenidas en el mismo puerto en agosto de 2023. Según fuentes consultadas, las 13 toneladas incautadas se acercan a la cantidad incautada en todo el año 2023 en Algeciras, que rondó las 14 toneladas.

Una operación en curso

La operación continúa bajo secreto y cuenta con registros y un detenido. La investigación también apunta a otros implicados, según fuentes cercanas al caso.

La empresa involucrada, ubicada en el municipio alicantino de Campello, ya había sido investigada anteriormente por alijos de drogas.

El tráfico de cocaína en Europa

Esta incautación se suma a la tendencia creciente de incautaciones de cocaína en los puertos europeos. Según el Informe Europeo sobre Drogas de 2023, casi el 70% de las incautaciones de drogas realizadas por las autoridades aduaneras en Europa se producen en los puertos.

Además de España, los puertos de Bélgica y Países Bajos son también objetivos habituales de las organizaciones de narcotráfico. El informe también advierte del creciente interés de estas redes en puertos más pequeños de otros países europeos.

Causas de la sobreproducción de cocaína

La saturación del mercado de la cocaína es una de las razones que explican las dimensiones de los cargamentos incautados. El año pasado, las incautaciones de cocaína alcanzaron un pico cercano a las 100 toneladas, según información policial.

Los grupos criminales han optado por trasladar la cocaína desde los países productores (Colombia, Perú y Bolivia) a países del Cono Sur (Argentina, Paraguay y Uruguay) para evitar los puertos colombianos. Esto ha llevado a Ecuador, que sufre una crisis de seguridad y problemas de crimen organizado, a convertirse en una de las principales plataformas de salida de estupefacientes en América Latina.

La prohibición de la fumigación aérea de cultivos de coca en Colombia ha provocado una disminución del ritmo de destrucción de plantaciones, lo que ha contribuido a la sobreproducción de droga en la región.

Además, el creciente consumo de fentanilo en Estados Unidos ha derivado la cocaína hacia Europa. Esta abundancia ha provocado una disminución de los precios en el mercado mayorista, aunque se mantienen en el minorista.