La reforma fiscal de Sheinbaum pretende rescatar a Pemex
La Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, anunció un nuevo régimen fiscal para Petróleos Mexicanos (Pemex), con el objetivo de mejorar su capacidad operativa y financiera, optimizar los recursos destinados a cumplir con sus obligaciones fiscales y de deuda, y reducir su carga fiscal.
El nuevo régimen fiscal consolidará múltiples impuestos en un solo gravamen denominado Derecho Petrolero para el Bienestar, lo que permitirá a Pemex mantener una mayor parte de sus ingresos para financiar sus propias operaciones y fortalecer su capacidad para cumplir con sus responsabilidades.
Además del cambio fiscal, Pemex implementará un plan de austeridad que incluye un recorte de gastos operativos por 50.000 millones de pesos. Este plan contempla la reducción del número de filiales de Pemex, que actualmente suman 40, para quedarse solo con las estrictamente necesarias.
El director de Pemex, Víctor Rodríguez Padilla, destacó que el plan también fomentará proyectos mixtos, tales como la producción de hidrocarburos, fertilizantes y energía renovable, para diversificar los ingresos y reducir la dependencia de las exportaciones de crudo.
El plan presentado por Sheinbaum también contempla un enfoque prioritario en el abasto nacional, siguiendo la política de la Secretaría de Energía, que asegura que Pemex enfocará sus esfuerzos en satisfacer la demanda interna, dejando en segundo plano las exportaciones.