Retrasos Persisten en la Línea Tarragona-Barcelona Pese a la Finalización de las Obras
El Regreso a la Normalidad que Nunca Llegó
Después de cinco meses de interrupciones y servicios alternativos, el restablecimiento del servicio directo entre Tarragona y Barcelona se suponía que marcaría el fin de las complicaciones para los viajeros. Sin embargo, desde el primer día, las incidencias técnicas y los problemas de infraestructura han provocado retrasos continuos, afectando la puntualidad y la fiabilidad del servicio. «Volvemos a estar igual», es la frase recurrente entre los pasajeros, reflejando la desilusión y el hartazgo ante una situación que parece no tener fin.
Según Adif, una incidencia técnica entre Torredembarra y Sant Vicenç de Calders afectó la circulación de las líneas R14, R15, R16 y R17. Posteriormente, Renfe informó de una interrupción por el mismo motivo, afectando también a los pasajeros de la R2 Sur y la R13. Se implementó un servicio alternativo por carretera entre Cunit y Torredembarra, así como entre Cunit y Sant Vicenç de Calders, pero esto no solucionó el problema de fondo, sino que simplemente añadió más tiempo y complicaciones al viaje.
La Voz de los Usuarios: Frustración y Desesperanza
El sentir general entre los usuarios es de indignación y abandono. Álvaro, un viajero frecuente con más de 20 años de experiencia en la línea, lamenta que la situación actual sea peor que hace cinco años. Relata que, cansado de esperar más de media hora en Tarragona, optó por completar el trayecto en coche. Liliana, otra usuaria, señala que incluso la alternativa de los autobuses ofrecía mayor seguridad en términos de puntualidad, aunque luego surgían problemas para enlazar con el siguiente tren en Sant Vicenç.
La paciencia de los usuarios está llegando a su límite. Ana Gómez, portavoz de la plataforma Dignitat a les Vies, expresa su frustración ante la falta de soluciones concretas y la necesidad de movilizaciones para exigir un servicio digno. «Si yo llego tarde al trabajo todos los días ¿qué le digo a mi jefe? ¿Que escuche las declaraciones de la consellera?», cuestiona Gómez, evidenciando la desconexión entre las promesas políticas y la realidad cotidiana de los viajeros.
Promesas y Perspectivas a Largo Plazo
La consejera de Territori, Sílvia Paneque, reconoció que «habrá retrasos durante los primeros días» y pidió «comprensión a los usuarios», fijando un horizonte de dos años para lograr un servicio de calidad. Sin embargo, estas promesas no convencen a los usuarios, quienes han perdido la confianza en Renfe tras años de incumplimientos y deficiencias. Pau, otro usuario, lamenta lo «difícil tener confianza en Renfe después del historial».
Las obras que continúan en Sant Vicenç también contribuyen a la inestabilidad del servicio. De hecho, los trenes regionales no se detendrán en esta estación hasta finales de mayo debido a la siguiente fase de las obras del Corredor Mediterráneo, lo que seguirá afectando a la operativa de los viajeros. La plataforma Dignitat a les Vies, junto con otras entidades como Trens Dignes y l’Associació per a la Promoció del Transport Públic, están planeando movilizaciones para exigir soluciones inmediatas y un servicio ferroviario eficiente y fiable. La presión social y la denuncia pública parecen ser las únicas vías para lograr que las autoridades tomen medidas concretas y se priorice la mejora de la infraestructura y la calidad del servicio ferroviario en Cataluña.