Salvador Illa presenta su nuevo Govern, con la seguridad y la financiación como prioridades
El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha presentado este jueves en el Parlament la estructura de su nuevo Ejecutivo, en el primer pleno en la Cámara tras su investidura el pasado mes de agosto. El socialista, que ha comparecido a petición propia, ha exhibido su perfil más conciliador y tras defender los nombramientos de los 16 consejeros les ha recordado sus principales tareas para estos cuatro años.
El jefe del Govern ha puesto un especial énfasis en la seguridad y la implementación de la financiación singular pactada con ERC en la investidura, que ha advertido que conseguirá aunque ha aceptado que “costará”.
Además, Illa ha hecho un llamamiento a la oposición para alcanzar grandes pactos de país en temas claves como la educación y que permitan darle continuidad a programas más allá del color político que esté en el Palau de la Generalitat.
La hoja de ruta del Govern
La “brújula” del mandato, ha insistido Illa, serán los acuerdos de la investidura suscritos con ERC y los comunes y ha apuntado que los nombres elegidos para su Govern, algunos de filiaciones políticas más allá del espacio socialista, buscan asegurar el cumplimiento de esas promesas.
Esas dos formaciones serán, ha insistido, los socios preferentes en la negociación de los Presupuestos de la Generalitat para 2025, si bien ha remarcado que no serán unas negociaciones exclusivas.
Illa ha recordado que solo tiene 42 votos asegurados en el pleno, lejos de los 68 de la mayoría absoluta. “Sé que mi Gobierno se lo tendrá que ganar”, ha aceptado.
Seguridad y financiación: las prioridades del Govern
Illa ha puesto énfasis en dos temas a la hora de desgranar las prioridades del Ejecutivo. La seguridad ha sido de lejos el punto en el que más se ha detenido, coincidiendo con un momento en que la imagen de los Mossos d’Esquadra sigue estando tocada por la gestión del frustrado regreso del expresident Carles Puigdemont y con un repunte en la percepción de inseguridad.
Sin embargo, la polémica sobre el alcance de la financiación singular que ha marcado el verano ha terminado por robarle el protagonismo.
“El acuerdo se cumplirá, sé que costará, pero se cumplirá. El Govern que presido honora los acuerdos a los que llega”, ha insistido el president.
“No contribuiremos, no alimentaremos, y no haremos el juego a los que solo quieren ruido, que no cuenten con nosotros”, ha agregado.
Las reacciones de la oposición
Tras la intervención del presidente de la Generalitat ha sido el turno del resto de formaciones parlamentarias. El primero en subir al atril ha sido Albert Batet (Junts), que con un tono punzante ha denunciado que el Gobierno de Illa ha empezado “tarde y mal” tras irse en agosto de vacaciones antes de intervenir en sede parlamentaria.
“Empezó a ejercer [de president] y se fueron de vacaciones. La cultura del esfuerzo de trabajo de este país es que cuando a uno le dan su trabajo en agosto no se va de vacaciones, se va a trabajar”, ha insistido Batet, que ha asegurado que Illa fue a Lanzarote de vacaciones “a recibir instrucciones” de Pedro Sánchez [con quien coincidió].
“Priorizar la Moncloa al Parlament demuestra el sucursalismo de su gobierno”, ha señalado, tras asegurar que el actual Ejecutivo es un gobierno de “partido y no de país”.
El presidente de la Generalitat, en su respuesta, ha criticado que Junts prefería estar preparando unas “elecciones”. “Querían bloquear el país, ¿y me habla de trabajo?”, le ha planteado
El tono ha sido más constructivo desde las filas republicanas, aunque marcando distancias. Marta Vilalta, portavoz de ERC, el partido que posibilitó la investidura del líder socialista, ha insistido en que el papel de su formación será “vigilar y exigir” el cumplimiento de un “buen acuerdo” de investidura: “Este gobierno tiene la fuerza para ejecutar los acuerdos pactados, ni más ni menos”, ha subrayado.
Vilalta ha insistido en avanzar en cuatro ámbitos: la resolución del conflicto político, la soberanía fiscal, la defensa del catalán y las “políticas republicanas” iniciadas en la legislatura anterior con Pere Aragonès.