Spotify aumentará precios en Francia por nueva tasa gubernamental
En el marco de una decisiva actuación del gobierno francés, la popular plataforma de streaming musical, Spotify, ha anunciado que incrementará sus tarifas en Francia como respuesta directa a la recién establecida tasa para financiar el Centre National de la Musique (CNM). Esta tasa representa un 1,2% del volumen de negocio generado por las plataformas de streaming, afectando por igual a todos los servicios independientemente de su tamaño.
Una 'Carta abierta' emitida por la filial francesa de Spotify destaca la imposibilidad de la empresa de asumir costos adicionales sin comprometer su sostenibilidad financiera. Advierten que dos tercios de cada euro recaudado mediante la suscripción serán destinados al gobierno y a los derechos de autor, poniendo en juego la viabilidad futura de la compañía.
Impacto en la Industria Musical y Usuarios
El anuncio de Spotify ha suscitado un amplio debate. La plataforma, que ya se había retirado de festivales de música franceses, subraya su aporte significativo al sector musical del país, generando 225 millones de euros en 2022. Con la implementación de la tasa CNM, los usuarios enfrentarán una posible alza que podría llevar el costo actual de 10,99 € y 17,99 € para los planes personal y familiar, respectivamente, a tarifas aún no definidas pero que prometen ser las más altas de Europa. Frente a esta situación, muchos consumidores ya consideran alternativas más asequibles, reactivando la discusión sobre el impacto de tales medidas fiscales en los patrones de consumo cultural.
A pesar del descontento expresado en redes sociales, la historia nos dice que tales aumentos no han tenido efectos significativos en la tasa de suscripción en otras áreas de streaming, como las plataformas de vídeo. Esto podría brindar una tranquilidad relativa a Spotify, aunque la inconformidad ciudadana hacia las crecientes tarifas y el alcance de las subvenciones en el arte francés es notable, lo que agrega otra dimensión crítica sobre el papel del Estado en la industria cultural.
En el horizonte se vislumbra un cambio en los hábitos de consumo con algunos apostando por volver a métodos tradicionales como la compra de discos físicos en formatos vinilo o CD, mientras que otros usuarios evalúan la conveniencia de mantener sus suscripciones ante el incremento de precios. La respuesta de la comunidad y la industria a estas nuevas tarifas será determinante para el futuro del streaming musical en Francia y posiblemente en el resto de Europa.