El Gobierno español ha dado el primer paso para aumentar el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) en 2025 con la convocatoria de un comité de expertos que asesorará sobre el incremento necesario para alcanzar el 60% del salario medio, tal y como establece la Carta Social Europea.

Factores que condicionan la negociación

La negociación del nuevo SMI estará condicionada por varios factores:

  • Inflación: Que el SMI crezca al menos al ritmo de la inflación (actualmente se sitúa en el 2,55%) es una prioridad para sindicatos y Gobierno para evitar que pierda poder adquisitivo.
  • Evolución salarial: Si los salarios pactados en convenios colectivos aumentan (actualmente se prevé un 3,8%), el SMI también debería hacerlo para mantener el objetivo del 60% del salario medio.
  • Reducción de jornada: Este posible cambio podría suponer un aumento de los costes laborales, lo que podría influir en la negociación del SMI.

Posiciones de los agentes sociales

Los sindicatos reclaman un incremento del SMI superior al 4%, que cubra la inflación y el aumento de los salarios. También piden que España cumpla con la directiva europea de salarios mínimos.

El Ministerio de Trabajo sostiene que el SMI ya se sitúa en el 60% del salario medio, por lo que un aumento en línea con el resto de salarios sería suficiente.

La patronal expresa su preocupación por la posible reducción de jornada, que podría aumentar los costes laborales y dificultar un acuerdo para incrementar el SMI.

Antecedentes

El SMI ha experimentado un importante crecimiento en los últimos años, pasando de 736 euros en 2018 a 1.134 euros en 2024. El Gobierno ha acordado las cuatro últimas subidas del SMI con sindicatos y patronal, aunque en el acuerdo de 2020 también participó la patronal.