La entrega de petróleo venezolano a Repsol se dispara a máximos de 20 años
La petrolera estatal venezolana, PDVSA, ha enviado más de tres millones de toneladas de crudo a España en el último año, lo que supone más del doble que en el ejercicio anterior y los niveles más altos de las últimas dos décadas. El aumento de las entregas se produce en un contexto de inestabilidad política en Venezuela, donde el presidente Nicolás Maduro acaba de revalidar su mandato sin presentar las actas que demostrarían su victoria en las elecciones de julio de 2024.
PDVSA envía crudo a Repsol como pago en especie
La mayor parte del crudo importado llega a través de los puertos de Bilbao, Cartagena y Tarragona, y tiene como destinatario a Repsol, que procesa dicho crudo pesado en sus refinerías. La entrega de este petróleo se produce como pago en especie a las deudas que Caracas ostenta con la compañía española. PDVSA también envía crudo a Repsol como pago en especie por la actividad que desempeña la firma en Venezuela, donde extrae gas para abastecer sus ciclos combinados de gas.
Incertidumbre sobre el impacto de las sanciones
El incremento de la llegada de petróleo desde Venezuela se produce en plena inestabilidad política en el país latinoamericano. La comunidad internacional da por hecho que las elecciones no fueron democráticas, y Estados Unidos, la Unión Europea y la mayoría de países del mundo han negado la legitimidad a Maduro. Está por ver qué repercusión tiene esto de cara a potenciales sanciones económicas contra Caracas.
En el sector se especula sobre la posibilidad de que el endurecimiento de las sanciones provoque que el petróleo que hoy en día PDVSA envía a España, Italia o EE.UU. gracias a la operativa de Repsol, ENI o Chevron, podría acabar vendiéndose a países aliados del chavismo que no respetan el régimen de sanciones internacionales, como Rusia, China o Irán.
Repsol reconoce el riesgo geopolítico en Venezuela
Repsol reconoce en sus estados financieros desde hace años que la situación en Venezuela es un riesgo geopolítico que tiene que gestionar la empresa. De hecho, ha habido largos periodos de tiempo recientes donde PDVSA no envió ni un cargamento de crudo a España, como desde finales de 2020 hasta y la primera mitad de 2022.
Sin embargo, Repsol ha recibido recientemente una licencia específica de la Oficina de Control de Activos Extranjeros de EE.UU. (OFAC) que le permite continuar sus operaciones en Venezuela en un marco de seguridad y estabilidad para el desarrollo de sus planes de negocio.
