Brad Pitt y George Clooney: Una amistad a prueba del tiempo y las crisis familiares
Las grandes estrellas de Hollywood, Brad Pitt y George Clooney, vuelven a compartir pantalla en la película 'Wolfs', que se estrenará próximamente en el Festival de Venecia. Esta colaboración ha suscitado gran expectación, no solo por el reencuentro de estos dos icónicos actores, sino también por su significado en un momento personal delicado para Brad Pitt.
Pitt se encuentra inmerso en una compleja batalla legal y mediática con su exesposa Angelina Jolie por la custodia de sus hijos. En los últimos tiempos, varios de ellos han renunciado públicamente al apellido de Pitt, lo que ha puesto en entredicho la imagen de 'padre de familia' que el actor había cultivado durante años.
- El 'bromance' como estrategia de imagen
- El resurgimiento del 'star system'
- El control de daños en la era de las redes sociales
El 'bromance' como estrategia de imagen
En medio de esta crisis, la entrevista conjunta de Pitt y Clooney para la revista GQ ha sido interpretada por algunos como un intento de desviar la atención de sus problemas personales y proyectar una imagen de unidad y camaradería. Los actores posan sonrientes y despreocupados en el viñedo francés de Pitt, Château Miraval, donde se celebró su boda con Jolie.
El 'bromance', término que surge de la unión de las palabras inglesas 'brother' (hermano) y 'romance' (romance), es una amistad platónica entre hombres que resulta especialmente atractiva para el público. En el caso de Pitt y Clooney, esta amistad se ha convertido en una herramienta de marketing para demostrar que Hollywood no es un lugar tan competitivo y despiadado como se suele pintar.
El resurgimiento del 'star system'
En la entrevista, Pitt y Clooney se sitúan como herederos de las grandes estrellas de la industria cinematográfica de antaño. Hablan con admiración y nostalgia de los grandes estudios de Hollywood, como Paramount, pese a que la película que presentan está producida por Apple Studios.
Estas referencias al pasado sugieren un resurgimiento del 'star system', un sistema en el que los estudios tenían un control absoluto sobre la vida y la carrera de sus actores. Los actores debían firmar contratos de exclusividad que podían durar años y estaban obligados a aceptar los papeles que se les ofrecían, incluso si no les gustaban. También se les exigía cambiar su nombre por uno más atractivo y, en el caso de las mujeres, someterse a cirugías estéticas.
Aunque el 'star system' se ha ido diluyendo a lo largo de las décadas, sus principios básicos siguen vigentes en la actualidad. Los actores y las actrices más importantes siguen estando sujetos a un intenso escrutinio público y deben cuidar su imagen cuidadosamente. La diferencia es que ahora el control no lo ejercen solo los estudios, sino también los medios de comunicación y las redes sociales.
El control de daños en la era de las redes sociales
En la era de las redes sociales, es imposible controlar por completo la información que circula sobre los famosos. Los paparazzi y los periodistas están al acecho de cualquier escándalo o indiscreción, y los usuarios de las redes sociales pueden amplificar y difundir rápidamente las noticias negativas.
Brad Pitt ha sido consciente de este hecho desde que solicitó el divorcio de Angelina Jolie en 2016. Desde entonces, ha contratado a un experto en gestión de crisis para que le ayude a controlar su imagen pública y minimizar el daño causado por las acusaciones de Jolie.
La entrevista conjunta con George Clooney es una muestra más de esta estrategia de control de daños. Al presentar a Pitt como un amigo leal y solidario, se intenta contrarrestar la imagen de 'padre distante' que ha proyectado en los últimos años.
Sin embargo, la pregunta es si esta estrategia será suficiente para restaurar la imagen de Brad Pitt y recuperar el cariño del público. Solo el tiempo lo dirá.