Chignahuapan, magia y tradición en la época decembrina poblana

Chignahuapan, ubicado en la Sierra Norte de Puebla, es uno de los 12 Pueblos Mágicos de la entidad y alcanza su apogeo durante las fiestas decembrinas gracias a su arraigada tradición en la elaboración de esferas, iglesias y paisajes que lo convierten en un destino único.

Las celebraciones decembrinas se viven con gran intensidad en el municipio, destacando entre sus principales atractivos la instalación de un árbol y una esfera monumentales en la plaza principal, adornados con una gran variedad de luces que aportan alegría y espectacularidad a las calles del Pueblo Mágico.

En las calles que rodean la plaza principal, es posible adquirir diversos modelos de esferas, elaborados por los artesanos locales. La producción de esferas es una de las principales actividades económicas de Chignahuapan, que lo convierte en un referente en este ámbito.

El municipio también cuenta con zonas como el Cerro de la Virgen, donde los visitantes pueden cortar su propio pino navideño. Esta experiencia única permite a los visitantes elegir su árbol, cortarlo y llevarlo a casa para decorarlo.

Entre los atractivos naturales de Chignahuapan se encuentran su laguna en la cabecera municipal y un hotel con aguas termales, uno de los puntos más concurridos por los turistas.

La Virgen Inmaculada de la Concepción, la más grande de Latinoamérica

La Virgen Inmaculada de la Concepción celebra su día el 8 de diciembre, y la imagen que se encuentra en la Basílica de Chignahuapan es la más grande de México y Latinoamérica.

La escultura, realizada por el artista José Luis Silva en madera de cedro, tiene una altura de 12 metros y se encuentra en el interior del templo. Representa a la Virgen Inmaculada de la Concepción derrotando al demonio, con el Niño Jesús en sus brazos y este a su vez sosteniendo una paloma blanca que simboliza al Espíritu Santo.

La escultura posa sus pies sobre el mundo, complementada con la representación de la expulsión de Adán y Eva del paraíso y un ángel. El templo fue construido por los propios pobladores de Chignahuapan a petición del párroco Idelfonso Illescas Pichardo, utilizando cantera negra para ello, con el objetivo de contar con una parroquia con mayor capacidad.

La imagen de la Virgen Inmaculada de la Concepción y su templo son parte de los atractivos que los visitantes pueden encontrar en Chignahuapan, Pueblo Mágico de Puebla.