Daddy Yankee enfrenta una batalla legal millonaria con su ex esposa
¿Qué está sucediendo exactamente?
La demanda, presentada ante el Tribunal de Carolina, no solo señala a Mireddys González, sino también a su hermana, Ayeicha González. Los cargos principales se centran en presuntas violaciones de los deberes fiduciarios, incumplimiento de contrato y daños económicos significativos. Daddy Yankee, cuyo nombre real es Ramón Ayala Rodríguez, acusa a las hermanas González de concentrar un poder indebido y tomar decisiones perjudiciales tanto para las empresas como para su persona, tanto en su faceta personal como artística.
Acusaciones graves y retiros millonarios
La demanda incluye acusaciones contundentes sobre la gestión financiera de las empresas. Se alega que las hermanas González no proporcionaron informes precisos de sus acciones, ignoraron las formalidades legales corporativas, tomaron decisiones financieras irresponsables y manejaron la contabilidad con negligencia. Además, se les acusa de privar indebidamente a Ayala Rodríguez de la toma de decisiones cruciales.
Uno de los puntos más explosivos de la demanda es la acusación de que, el 12 de diciembre pasado, las hermanas González retiraron 100 millones de dólares de las cuentas corporativas. Este movimiento, según la demanda, se realizó en un intento de liquidar unilateralmente los activos empresariales antes de que un tribunal pudiera ordenar la entrega del control.
Más detalles sobre las presuntas irregularidades
Las acusaciones no terminan ahí. La demanda también expone que las hermanas González supuestamente ocultaron información, destruyeron evidencia, despilfarraron recursos, incumplieron con las obligaciones tributarias, no mantuvieron registros precisos de los ingresos generados por el trabajo del artista y, sorprendentemente, dejaron de cobrar miles de dólares en cheques que terminaron caducando.
Cronología del conflicto
Un divorcio que destapó una olla de grillos
Daddy Yankee y Mireddys González se divorciaron oficialmente el 18 de febrero, poniendo fin a una relación de casi tres décadas y dos hijos en común. Sin embargo, la separación no ha sido pacífica. El pleito legal entre las partes continuó incluso después de que Daddy Yankee objetara en febrero la decisión judicial de cerrar el caso, argumentando que las demandadas aún no habían proporcionado toda la información requerida sobre las empresas.
¿Qué sigue en esta saga legal?
El futuro de esta batalla legal es incierto, pero lo que está claro es que Daddy Yankee está dispuesto a luchar por lo que considera justo. La demanda de 250 millones de dólares representa una apuesta audaz y un claro mensaje de que el artista no tolerará la negligencia ni las irregularidades en la gestión de sus empresas. La comunidad legal y los fanáticos del reguetón estarán atentos al desarrollo de este caso, que promete ser un largo y complicado proceso.