Silvia Pinal y su cuadro pintado por Diego Rivera: ¿Dónde está ahora?
El emblemático cuadro de la actriz Silvia Pinal, pintado por el reconocido muralista mexicano Diego Rivera, ha sido objeto de especulaciones y rumores desde el fallecimiento de la artista en noviembre de 2022.
La historia del cuadro
La historia del cuadro se remonta a 1956, cuando Silvia Pinal contrató al arquitecto Manuel Rosen Morrison para construir su casa en la Ciudad de México. Fue Rosen quien sugirió incluir un cuadro de Rivera en la decoración, pero Pinal inicialmente rechazó la idea debido a los altos costos.
Sin embargo, el arquitecto logró concertar una cita con Rivera, quien accedió a realizar el retrato. Tras varias sesiones, el cuadro fue entregado a Pinal el 3 de noviembre de 1956, día de su santo. Rivera decidió regalarle la obra a la actriz, quien quedó maravillado por su belleza.
El destino del cuadro
Tras la muerte de Silvia Pinal, surgieron dudas sobre el paradero del cuadro. Inicialmente, se especuló que había sido sacado de la residencia de la actriz por un grupo de personas. Posteriormente, se afirmó que la hija de Pinal, Alejandra Guzmán, se había llevado la pintura para su restauración.
Alejandra Guzmán ha confirmado que efectivamente se llevó el cuadro para su restauración, con el consentimiento de sus hermanos. Según Luis Enrique Guzmán, otro hijo de Pinal, el cuadro era parte de la herencia que su madre le había dejado a Alejandra desde 2004. Enrique Guzmán, exesposo de Pinal, también ha apoyado esta versión.
Actualmente, el cuadro se encuentra en proceso de restauración. Una copia del mismo está colgada en la casa de Silvia Pinal en la Ciudad de México.
El legado del cuadro
El cuadro de Diego Rivera es un testimonio del talento artístico de dos grandes figuras mexicanas. Su valor no solo reside en su valor monetario, sino en su significado histórico y sentimental.
La historia del cuadro también destaca la importancia de preservar y restaurar el patrimonio cultural. El legado de Silvia Pinal y Diego Rivera sigue vivo a través de esta obra de arte, que continúa inspirando y deleitando a las generaciones venideras.
"El cuadro es un tesoro nacional y un recuerdo invaluable de mi madre", declaró Alejandra Guzmán.
