La historia nunca contada de "El Chorrito", la icónica canción de Cri-Cri

¡Canta conmigo! "Allá en la fuente había un chorrito, se hacía grandote, se hacía chiquito...". Esta alegre melodía, un himno para generaciones de niños mexicanos, esconde una historia fascinante que hoy te revelamos.

La fuente encantada de Cri-Cri

El autor de esta entrañable canción, Francisco Gabilondo Soler, conocido como Cri-Cri, encontró la inspiración en un lugar muy especial: la casa de su abuela. Allí, en medio de un amplio patio, se erguía una fuente que captó su atención.

La peculiaridad de esta fuente era que el chorro de agua cambiaba constantemente, a veces impetuoso y otras apenas un hilillo. Este fenómeno llamó la atención del observador Cri-Cri, quien vio en él una fuente de inspiración.

La observación, clave de la creación

Cri-Cri era un maestro de la observación. Aquello que le intrigaba, lo transformaba en canciones infantiles que perdurarían en el tiempo. Así nació "El Chorrito", un reflejo de su capacidad para capturar la magia de lo cotidiano.

El legado de una canción eterna

Hoy, "El Chorrito" sigue siendo una pieza fundamental en la educación musical de los niños mexicanos. Se enseña en las escuelas, se canta en los hogares y se transmite de generación en generación.

Esta canción es un testimonio del poder de la observación, la imaginación y la capacidad de Cri-Cri para transformar lo ordinario en extraordinario. Y así, el chorrito de agua que un día llamó su atención sigue fluyendo, deleitando a niños y adultos por igual.

“Cri-Cri era una persona sumamente observadora. Aquellas cosas que le llamaban la atención, él las canalizaba en canciones, mismas que han perdurado por muchos años”, afirmó Tiburcio Gabilondo, hijo del compositor.

Fuente: Milenio Entretenimiento