Emilia Pérez: Desafiando estereotipos y explorando la identidad
En la nueva película del cineasta francés Jacques Audiard, "Emilia Pérez", nos adentramos en los límites de la identidad y la violencia. Protagonizada por Karla Sofía Gascón, la cinta explora la construcción de género, el impacto del machismo y la búsqueda de uno mismo en un mundo marcado por la violencia.
Rompiendo barreras
"Emilia Pérez" ha generado reacciones divididas debido a su delicada temática y su representación de la violencia en México. Sin embargo, su mensaje es potente: la necesidad de desafiar los estereotipos.
"Han puesto siempre a las personas LGBT como payasetes que van a cumplir su función de entretenimiento, creo que es un paso muy importante no es la primera película que se hace tocando temas tan profundos, pero sí va a tocar muchas fibras", afirma la actriz Karla Sofía Gascón.
La música como lenguaje
La música juega un papel crucial en la película, desafiando la idea de que es superficial. Adriana Paz, quien interpreta un papel clave, destaca que "la música no es superficial; puede ir hasta lo más profundo. Si escuchas un tambor hay algo que tiene que ver con las vibraciones, que va más allá de ti".
Para Audiard, la música es un lenguaje que permite abordar temas complejos como la violencia y la identidad. Desde el principio, concibió la película como una ópera, donde "el canto era la única manera de hacer hablar al corazón en lugar de la cabeza."
Un viaje de transformación
El origen de "Emilia Pérez" se encuentra en la novela "Ecoute", que cautivó a Audiard por su paradoja: un jefe de un cartel, símbolo de la hipermasculinidad, que decide cambiar de sexo para escapar de su destino.
Esta historia le permitió al director explorar cuestiones profundas sobre la feminidad y la violencia. Para Audiard, la transición del personaje no es solo física, sino también un reflejo de su deseo de dejar atrás un mundo marcado por el poder y la brutalidad.
El camino hacia los Óscar
El éxito de "Emilia Pérez" se ha extendido desde las proyecciones iniciales hasta el reconocimiento en Cannes. Para Karla Sofía, este momento representa un hito: "nos reciben con emoción, aplausos y lágrimas".
Adriana Paz ve este proyecto como un antes y un después en su carrera: "haber ganado en Cannes y escuchar los comentarios de orgullo por ser parte de este reconocimiento es un sueño".
Ahora, la película se encuentra en la carrera hacia los Premios de la Academia, generando expectativas y emocionando al público.