Eric, una serie perturbadora y atrevida que desvela los secretos oscuros de los años ochenta
La serie está ambientada en un Nueva York de 1985 ficticio, donde un titiritero inspirado en Jim Henson, creador de Barrio Sésamo, se ve envuelto en una trama de adicción, perversión y maldad pura.
La oscuridad detrás del espectáculo infantil
Eric explora el lado oscuro del mundo del entretenimiento infantil, revelando las cloacas que se esconden debajo de la fachada de fantasía y candor. La serie no se anda con rodeos y presenta directamente la premisa: la inocencia de los niños está amenazada por los adultos que los rodean.
Un reflejo de los miedos actuales
La trama de Eric resuena profundamente con el público actual, que ha sido testigo de numerosos escándalos de abuso y maltrato infantil. La serie sirve como un recordatorio inquietante de que la oscuridad puede esconderse en los lugares más inesperados.
Un reproche inconsciente a la generación de los ochenta
Eric no solo entretiene, sino que también plantea cuestiones importantes sobre la responsabilidad y la culpa. La serie sugiere que la generación de los ochenta, que hoy es adulta, puede haber sido cómplice de los horrores que se cometían contra los niños en aquella época.
Protagonistas y actuaciones brillantes
Benedict Cumberbatch brilla en el papel del titiritero Eric, aportando matices y profundidad a un personaje complejo. Gaby Hoffmann también ofrece una actuación destacada como la exhausta colega de Eric. Juntos, crean una dinámica convincente que mantiene al espectador pegado a la pantalla.
Una serie que invita a la reflexión
Eric es una serie perturbadora, atrevida y que invita a la reflexión que explora los lados oscuros de la sociedad y el impacto duradero del trauma infantil. Su trama envolvente, sus actuaciones estelares y sus temas relevantes la convierten en una visita obligada para los amantes de las series dramáticas y de suspenso.