Esteban Bullrich y su incansable lucha contra la ELA: "Mi principal motivación es encontrar la cura"

Un diagnóstico inesperado

Bullrich comenzó a experimentar síntomas de ELA en septiembre de 2020, cuando notó que su lengua se patinaba. Inicialmente, no le dio mucha importancia, pero a medida que los síntomas persistieron, comenzó a investigar. Unos meses después, recibió el diagnóstico oficial.

El apoyo de la familia y la fe

Ante la noticia, Bullrich contó con el apoyo incondicional de su familia. Juntos, decidieron enfrentar la enfermedad unidos. "Cuando lo supimos, juntamos a nuestros cinco hijos y les contamos el diagnóstico", relató Bullrich. "Les dije que mi cuerpo iba a envejecer más rápido que lo normal."

La fe también ha sido un pilar fundamental para Bullrich. Todos los días escucha la misa y encuentra consuelo en la espiritualidad.

Una vida activa a pesar de la ELA

A pesar de las limitaciones físicas que impone la ELA, Bullrich se mantiene activo. Intenta pasar la mayor parte del día en la silla y realiza terapias como kinesiología y fonoaudiología.

Además, dedica tiempo a leer, escribir, estudiar empresas y buscar información sobre la ELA. "Juego al ajedrez, contesto mensajes, estudio sobre empresas, leo ensayos y revistas científicas investigando sobre la ELA, buscando la cura", enumeró.

La búsqueda de una cura

Bullrich considera que encontrar una cura para la ELA es su principal motivación. Cree que su enfermedad tiene un propósito y que debe aprovecharla para ayudar a otros que padecen la misma dolencia.

"Soy un privilegiado y tengo la misión de encontrar la cura para esta enfermedad", afirmó. "Estoy en ese camino."