La industria del cine atraviesa una crisis tras una serie de eventos desafortunados, desde huelgas hasta incendios forestales.

Huelgas y disputas contractuales

En la segunda mitad de 2023, la industria cinematográfica se paralizó debido a las huelgas de actores y guionistas. Estos paros redujeron los rodajes casi a la mitad, pasando de 9.000 a 5.500 producciones.

Una vez finalizadas las huelgas, las producciones tardaron en recuperarse, ya que los proyectos estaban en pausa y el nuevo convenio colectivo, si bien mejoró las condiciones laborales de los trabajadores, incrementó los costes de producción para las grandes productoras y plataformas de entretenimiento.

Pérdida de empleos y fuga de talento

La disminución de las producciones ha provocado una pérdida significativa de empleos en todos los ámbitos, desde maquilladores hasta productores. Según la oficina de empleo de California, se destruyeron más de 12.000 puestos de trabajo entre mayo de 2023 y mayo de 2024.

Además, California se enfrenta a la competencia de otros estados y países que ofrecen mayores incentivos a la producción. Nueva York ofrece 700 millones de dólares en beneficios fiscales anuales, mientras que Georgia, con Atlanta como centro de rodajes, no tiene límites en sus ayudas.

Esto ha llevado a una fuga de talento y producciones hacia destinos más atractivos, como Canadá, España y otros países con condiciones más favorables.

Incendios forestales y su impacto

Los recientes incendios forestales, como Eaton y Palisades, han empeorado la situación. Los rodajes se han suspendido por la mala calidad del aire, las dificultades de desplazamiento y por respeto a las víctimas. Los paisajes también han cambiado, lo que limita los recursos disponibles para las producciones.

La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, ha prometido nuevos incentivos para la industria cinematográfica, pero es probable que los recursos se destinen a otras prioridades debido a la crisis provocada por los incendios.

Conclusión

Las colinas de Hollywood han estado convulsionadas durante el último año y medio, y la situación no parece mejorar. La industria del cine, que da empleo a más de 680.000 personas y genera 115.000 millones de dólares en la región, lucha por sobrevivir.

Los trabajadores del cine siguen enfrentándose a la incertidumbre y a la necesidad de seguir sobreviviendo, incluso en 2025.