Pedro Fernández, feliz y agradecido en su faceta como abuelo

El reconocido cantante y actor mexicano, Pedro Fernández, compartió recientemente su experiencia como abuelo, una etapa que le ha traído gran satisfacción y alegría a su vida familiar.

Agradecido con su familia

Fernández, de 54 años, expresó su agradecimiento y felicidad por disfrutar este momento en compañía de sus seres queridos: "Feliz, feliz con mis nietos, feliz con mi familia. La verdad es que es una etapa maravillosa que estamos disfrutando enormemente, agradecidos con Dios, agradecidos con nuestra familia propiamente".

Energía renovada en su hogar

El intérprete comentó que la llegada de sus nietos ha traído una energía especial a su hogar: "Son la luz, la luz que le da algo nuevo a nuestro hogar, a nuestra familia y estamos muy contentos, muy felices".

Un regalo único

Para Fernández, la experiencia de ser abuelo representa un regalo único que enriquece su vida: "No ser abuelo, me imagino que pudiera compararlo con eso: El no querer aceptar o ser o vivir esa etapa, es como renunciar a vivir una vida más longeva, más plena, con un aderezo maravilloso que son los nietos".

Familia y trayectoria consolidada

Pedro Fernández, cuyo nombre real es José Martín Cuevas Cobos, lleva más de 35 años casado con Rebeca Garza Vargas. La pareja tiene tres hijas: Karina, Osmara y Gema, quienes han sido fundamentales en su vida familiar. Actualmente, como abuelo, Fernández disfruta pasar tiempo con sus nietos, a quienes considera un regalo especial.

Una carrera en ascenso

Desde que debutó a los 7 años con su álbum inicial, Fernández ha sido una figura clave en la música ranchera, con temas como "La de la mochila azul" y "Yo no fui". Su carrera en la televisión también incluye papeles destacados en telenovelas como "Hasta que el dinero nos separe" y "Cachito de cielo".

En la actualidad, el cantante continúa activo tanto en la música como en la televisión. Con su familia como prioridad y una carrera consolidada, Pedro Fernández vive un momento pleno, agradecido por las experiencias que ha tenido la oportunidad de disfrutar.