El bailarín Rafael Amargo, acusado de tráfico de drogas

El bailarín y coreógrafo Rafael Amargo se sienta en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de Madrid, junto a otras dos personas, acusado de tráfico de drogas. La Fiscalía pide para él 9 años de prisión y una multa de un millón de euros. La acusación se basa en unas grabaciones telefónicas intervenidas por la policía, en las que supuestamente se escucha a Amargo hablando sobre la compra y venta de drogas.

Las conversaciones telefónicas

En las conversaciones telefónicas intervenidas por la policía, Amargo habla con varias personas sobre la compra y venta de drogas. En una de las conversaciones, Amargo le dice a un supuesto cliente que tiene un gramo de cocaína para él, pero que es para su consumo personal. En otra conversación, Amargo le pide a otra persona que le consiga una cantidad grande de droga, porque necesita ganar dinero.

El registro de su vivienda

Además de las conversaciones telefónicas, la policía también registró la vivienda de Amargo, donde encontró pequeñas cantidades de cocaína y marihuana. La policía también encontró una báscula de precisión, que se suele utilizar para pesar drogas. Amargo ha negado los cargos y ha dicho que las drogas encontradas en su vivienda eran para su consumo personal.

El juicio

El juicio contra Amargo comenzó el pasado jueves en la Audiencia Provincial de Madrid. La Fiscalía pide para él 9 años de prisión y una multa de un millón de euros. La defensa de Amargo ha pedido la absolución de su cliente, alegando que las conversaciones telefónicas han sido manipuladas y que las drogas encontradas en su vivienda eran para su consumo personal.

La petición de la Fiscalía

La Fiscalía ha pedido 9 años de prisión para Amargo, así como una multa de un millón de euros. La Fiscalía considera que Amargo es el cabecilla de una organización dedicada al tráfico de drogas y que se ha lucrado con esta actividad.

La petición de la defensa

La defensa de Amargo ha pedido la absolución de su cliente, alegando que las conversaciones telefónicas han sido manipuladas y que las drogas encontradas en su vivienda eran para su consumo personal. La defensa también ha alegado que Amargo no es el cabecilla de una organización dedicada al tráfico de drogas.

Los testigos

En el juicio han declarado varios testigos, entre ellos los policías que registraron la vivienda de Amargo y los agentes que intervinieron las conversaciones telefónicas. También han declarado los supuestos clientes de Amargo, que han confirmado que compraban drogas al bailarín.

El veredicto

El juicio contra Amargo aún no ha terminado y se espera que el veredicto se conozca en las próximas semanas. Si Amargo es declarado culpable, podría enfrentarse a una pena de 9 años de prisión y una multa de un millón de euros.

Conclusión

El juicio contra Rafael Amargo es un caso complejo que aún no ha terminado. La Fiscalía pide para él 9 años de prisión, mientras que la defensa pide su absolución. El veredicto se conocerá en las próximas semanas.