Rusia prohíbe la proyección de "El Aprendiz", la película sobre Donald Trump

El Ministerio de Cultura de Rusia ha prohibido la proyección de la película "El Aprendiz", un filme biográfico sobre la juventud del expresidente de Estados Unidos, Donald Trump. La distribuidora Atmosfera Kino confirmó la noticia, indicando que la cinta no recibió la licencia necesaria para su exhibición en el país.

El motivo de la prohibición no ha sido revelado oficialmente. Sin embargo, se especula que podría estar relacionado con las críticas que Trump ha lanzado contra Rusia en el pasado. El expresidente ha acusado repetidamente a Rusia de interferir en las elecciones estadounidenses y de llevar a cabo ciberataques contra Estados Unidos.

"El Aprendiz" se estrenó en mayo de 2018 en el Festival de Cine de Cannes. La película, dirigida por el iraní Ali Abbasi, aborda los primeros años de Trump como empresario en la ciudad de Nueva York. El papel de Trump es interpretado por el actor Sebastian Stan.

La prohibición de "El Aprendiz" es la última de una serie de medidas tomadas por el gobierno ruso para restringir el acceso a contenidos críticos con el Kremlin. En los últimos años, Rusia ha prohibido la proyección de varias películas que tratan temas controvertidos o que han sido realizadas por directores críticos con el gobierno.

Reacciones a la prohibición

La prohibición de "El Aprendiz" ha generado reacciones encontradas. Algunos críticos han condenado la medida, calificándola de censura. Otros han defendido la decisión del gobierno ruso, argumentando que tiene derecho a proteger su propia cultura.

El propio Trump no se ha pronunciado públicamente sobre la prohibición. Sin embargo, en el pasado ha criticado las películas que lo retratan de forma negativa.

Contexto

Las relaciones entre Rusia y Estados Unidos han sido tensas desde la anexión de Crimea por parte de Rusia en 2014. La administración Trump ha impuesto sanciones a Rusia y ha acusado al país de interferir en las elecciones presidenciales estadounidenses de 2016.

Rusia ha negado las acusaciones de interferencia electoral y ha criticado las sanciones impuestas por Estados Unidos. El gobierno ruso también ha tomado medidas para restringir el acceso a contenidos críticos con el Kremlin, tanto en los medios de comunicación como en las redes sociales.