The Kooks son una de las bandas más emblemáticas e influyentes del indie pop-rock británico, y recientemente regresaron a Argentina para un show en vivo electrizante y lleno de nostalgia.
El concierto tuvo lugar en Groove, y la banda liderada por Luke Pritchard subió al escenario poco después de las 21:00 horas para ofrecer un set de más de 90 minutos.
Un repertorio repleto de éxitos
El show comenzó con “Always Where I Need To Be”, un clásico de su álbum “Konk” de 2008. A partir de ahí, la banda interpretó una serie de éxitos y canciones muy queridas por sus fans, como “Sofa Song”, “Eddie’s Gun”, “Ooh La”, “She Moves In Her Own Way” y “Bad Habit”.
El público disfrutó de un momento más bailable y pop con “Westside”, “Forgive and forget” y “Closer”, del álbum “10 Tracks To Echo In The Dark” de 2022.
Momentos especiales
Pasada la mitad del show, Pritchard se quedó solo con su guitarra para una sentida interpretación de “Seaside”. Posteriormente, la banda recordó al fallecido Liam Payne interpretando una canción de One Direction.
El rock de guitarra volvió con fuerza con “See The World”, “Do You Wanna” y “Matchbox”. El clásico “Junk of the Heart (Happy)” fue la elegida para cerrar el show antes de los bises.
Tras una breve pausa, la banda regresó al escenario para interpretar “Around Town” y la ovacionada “Naïve”, poniendo fin a una noche inolvidable.
Una conexión especial con Argentina
The Kooks siempre ha tenido una conexión especial con Argentina, y este show lo demostró una vez más. La banda se siente como en casa cada vez que visita el país, y el público argentino les brinda un cariño y una energía inigualables.