Hoy quise escribir de un tema que muchos dicen que les sabe a mierda, para no aceptar que también les interesa. Un tema que hizo reunir a la familia alrededor de una pantalla, para ver cómo un actor, al que llevaban tildando de “cachón” por más de una semana, confrontaba a su esposa frente a no sé cuántos televidentes que pueda tener ese programa. Sí, estoy hablando de Alejandro Estrada y Nataly Umaña.

Tengo varias observaciones al respecto. Yo también me pegué al televisor y me impacté, hice caras, aplaudí, me preocupé, todo. Me llamó el chisme, el morbo de saber qué iba a pasar, qué le iba a decir. Yo, que confieso, amo a la Doctora Polo, me sé capítulos de Caso Cerrado, veo La Rosa de Guadalupe por Tik Tok, pues obvio no podía perderme esa escena tan colombiana.

Cómo nos encanta juzgar y ver lo que les pasa a otros. Toda Colombia se unió para apoyar al man al que le montaron los cachos en vivo y en directo, después de 12 años de matrimonio. Seguro RCN ganó el rating ese día.

Colombia es un país machista: aquí si una mujer trabaja y ve poco a su hijo, es mala madre. Pero si un padre hace lo mismo, pues pobrecito, es que le toca muy duro. En este caso puntual, si una mujer es infiel, se convierte en lo peor. Pierde su valor, no merece respeto, no tiene principios, es vagabunda y mil adjetivos más. Sin mencionar que ningún hombre se querría involucrar con ella. En cambio si lo hace un man, no pasa nada. Es hombre y los hombres a veces la cagan.

Y sé que muchos leerán esto (yo creyendo que muchos me leen) y dirán que no es así, que a los hombres también se les da palo. Pero me mantengo firme en lo que digo. A las mujeres SIEMPRE nos va peor. No estoy justificando la infidelidad, pero por qué nadie dijo nada de la forma en la que Alejandro le agarró la cara a Nataly. Tenemos muy normalizadas esas conductas que son “pasivo agresivas”. O por qué no se dice nada de cómo ahora el programa comenzó a sacar un montón de contenido de Nataly para humillarla aún más.

A ver, sí, el realmente humillado fue Alejandro, pero en medio de todo quedó como un Rey y es ahora el soltero más cotizado. Esto lo digo desde lo superficial, seguro que, si a una persona le pasa esto, se le derrumba la vida. Ah, y también lo hablo asumiendo que fue "real" y que no hay dinero de por medio.

El chisme nos da vida. Hablar de la vida de otros para no caer en la propia es una forma de salvarnos a nosotros mismos. Pero eso no quita que aún en el 2024, tenemos grabado en el inconsciente colectivo que las mujeres no se pueden equivocar o ser igual de crueles que los hombres, porque son mujeres.

P. D.: No estoy justificando a nadie. Ser infiel está mal independiente de quién seas.