Corea del Sur lucha contra el envejecimiento de la población con soluciones innovadoras: robots e IA
Corea del Sur se enfrenta a una crisis demográfica sin precedentes: su población envejece a un ritmo acelerado mientras que la tasa de natalidad cae en picado, situándose en uno de los índices más bajos del mundo con sólo 0,7 hijos por mujer. Para 2025, se prevé que el 20% de su población tenga más de 65 años, lo que el gobierno ha calificado de "catástrofe demográfica".
Ante este panorama, el país ha empezado a aplicar soluciones tecnológicas innovadoras para mitigar la escasez de mano de obra y, al mismo tiempo, cuidar de sus ciudadanos más vulnerables: las personas mayores.
El problema de la soledad y el envejecimiento en Corea del Sur
Además del envejecimiento de la población, Corea del Sur se enfrenta a una crisis de soledad que afecta principalmente a las personas mayores. Se calcula que un alarmante 21,8% de los mayores de 65 años vive solo, y este problema va en aumento. La soledad extrema puede tener consecuencias fatales, y las "muertes solitarias", conocidas como godoksa, son cada vez más comunes. En 2021, se registraron 3378 muertes de este tipo, lo que pone de manifiesto la gravedad del problema.
Ante esta situación, el gobierno coreano ha empezado a explorar el uso de la Inteligencia Artificial (IA) para ofrecer compañía y cuidados a la población envejecida, según un artículo del sitio web tecnológico Xataka.
La IA al rescate: robots y llamadas automatizadas para aliviar la soledad
Una de las principales iniciativas que ha tomado forma es el proyecto CLOVA CareCall, desarrollado por Naver, uno de los mayores conglomerados de Internet de Corea del Sur. Esta solución consiste en un centro de llamadas automatizado que utiliza IA para realizar llamadas periódicas a las personas mayores, comprobando su bienestar y proporcionándoles compañía conversacional. Lanzado inicialmente para monitorizar los síntomas durante la pandemia de COVID-19, CLOVA ha evolucionado hasta convertirse en un servicio nacional utilizado por 70 gobiernos locales para reducir las muertes solitarias.
Pero la IA no se limita a las llamadas telefónicas. Un ejemplo de ello es Hyodol, un muñeco robótico de aspecto suave y tierno que, además de ser un objeto de compañía, está equipado con tecnología avanzada. Estos muñecos son capaces de reconocer emociones, mantener conversaciones, reproducir música e incluso hacer recordatorios de voz y ejercicios físicos. Son ideales para personas mayores con demencia, ya que ayudan a mitigar la soledad y promueven interacciones que favorecen la salud mental.
El gobierno de Corea del Sur ha adquirido 7000 unidades de estos robots, cada uno con un coste de 1093 euros, para distribuirlos entre la población mayor con demencia. Además, los robots están conectados a una aplicación y a una plataforma web que permiten a los cuidadores controlar a las personas mayores a distancia, lo que añade un nivel de seguridad y atención a la iniciativa.
Impacto positivo: ¿una herramienta eficaz para las personas mayores?
Los estudios preliminares sugieren que los robots con IA pueden ser una herramienta complementaria en el cuidado de las personas mayores. Las investigaciones llevadas a cabo por la Universidad de Carolina del Norte y la Universidad de Gangwon han descubierto que estos robots pueden mejorar la calidad de la atención, especialmente en el caso de personas con demencia. Aunque estos estudios aún son limitados, la tecnología promete ser una ayuda vital en el cuidado de una población cada vez más envejecida.
Sin embargo, el uso de estos robots no está exento de controversia. Las preocupaciones sobre la privacidad y los riesgos asociados al tratamiento de datos personales siguen siendo un tema de debate, especialmente en lo que respecta a la seguridad del uso de la IA en situaciones tan sensibles como el cuidado de las personas mayores.
