La inteligencia artificial (IA) irrumpe en el panorama empresarial como una prioridad de inversión fundamental. Según una encuesta reciente de KPMG, el 64% de los CEOs a nivel mundial la consideran su "principal prioridad de inversión" para 2024.

Beneficios y preocupaciones de la IA

A pesar de los desafíos éticos (reconocidos por el 61% como los "más difíciles de abordar"), la mayoría de los encuestados (76%) confían en que la IA no afectará al número de puestos de trabajo.

Implicaciones para los empleados

La integración de la IA suscita preocupaciones sobre el futuro del empleo. Sin embargo, el 38% de los CEOs creen que sus empleados poseen las habilidades necesarias para aprovechar los beneficios de la IA. Además, el 58% reconocen que la IA generativa implica una reevaluación de las habilidades requeridas para los puestos junior.

La encuesta también destaca las oportunidades que ofrece la IA para el desarrollo de la fuerza laboral. El 63% de los CEOs esperan un rendimiento de la inversión en los próximos 3 a 5 años.

En conclusión, la IA se posiciona como una inversión estratégica para las empresas. Si bien existen desafíos, las organizaciones que inviertan en el desarrollo de las habilidades necesarias y aborden las preocupaciones éticas podrán aprovechar el poder de la IA para impulsar la innovación, la eficiencia y el crecimiento.