Meta, la empresa de Mark Zuckerberg que controla Facebook, anuncia que cierra su programa contra las fake news en Estados Unidos.
Repercusiones políticas
A días de la jura de Donald Trump en la Casa Blanca, el gigante de las redes sociales Meta anunció que cesará su programa de fact-checking (verificación digital) en Estados Unidos, un importante retroceso en sus políticas de moderación de contenido. Esta medida ha generado reacciones encontradas, con algunos expertos expresando preocupación por el aumento potencial de la desinformación y las noticias falsas.
Críticas al programa de verificación de datos
Mark Zuckerberg, fundador y CEO de Meta, justificó la decisión afirmando que el programa de verificación de datos había ido demasiado lejos y que había llevado a una excesiva censura. También destacó que la reciente elección presidencial había puesto de manifiesto un cambio cultural hacia una mayor priorización de la libertad de expresión.
Cambios en las políticas de moderación
Además del cierre del programa contra las fake news, Meta también anunció que simplificará sus políticas de contenido y que eliminará las restricciones en temas como la inmigración y el género. La compañía también planea cambiar la forma en que aplica sus políticas para eliminar la gran mayoría de los errores de censura, centrándose en violaciones ilegales y de alta gravedad.
Reacciones mixtas
La decisión de Meta ha generado reacciones mixtas. Algunos críticos han argumentado que conducirá a un aumento de la desinformación y las noticias falsas, mientras que otros han elogiado el enfoque de la compañía en la libertad de expresión. El New York Times señaló que la medida probablemente complacerá a la administración del presidente electo Donald Trump y sus aliados conservadores, que han criticado la práctica de Meta de agregar avisos o advertencias a publicaciones cuestionables o falsas.
Implicaciones a largo plazo
Queda por ver cuáles serán las implicaciones a largo plazo de la decisión de Meta. Algunos expertos han expresado su preocupación de que pueda conducir a un aumento de la desinformación y la polarización política, mientras que otros creen que conducirá a un entorno en línea más abierto y libre.