Sony anuncia el fin de la producción de discos Blu-ray
Sony ha anunciado que cesará la producción de discos Blu-ray y otros formatos físicos de grabación como MiniDisc y cintas Mini DV a partir de febrero de este año. Esta decisión marca el cierre de una era para estos formatos que fueron populares en el pasado y se suma a los cambios en las tendencias de consumo de contenido multimedia.
Caída en ventas, auge del streaming y almacenamiento digital
La caída en las ventas es uno de los principales factores detrás de esta decisión. Según datos de VideoScan, el Blu-ray mantuvo solo el 31% del mercado de discos ópticos en 2023, mientras que el DVD conservó una mayor cuota con el 52%. Aunque formatos como el Blu-ray HD lograron un ligero crecimiento, alcanzaron únicamente el 16,2% del mercado el año pasado.
El cambio en las preferencias de los consumidores también ha influido en este declive. La transición hacia plataformas de streaming, almacenamiento en la nube y dispositivos de almacenamiento externos ha desplazado gradualmente a los formatos físicos. Sony, al igual que otras empresas del sector, ha reconocido la necesidad de adaptarse a estas nuevas dinámicas del mercado.
Sony no es la única
Sony no es la única compañía que ha abandonado este mercado. Empresas como Samsung y Oppo ya habían dejado de fabricar reproductores de Blu-ray, mientras que LG anunció en diciembre de 2024 la descatalogación de sus propios dispositivos tras años de no innovar en el sector.
Este declive refleja una tendencia global: el consumo de contenido se ha volcado hacia servicios en línea, dejando atrás formatos que, en su momento, marcaron una revolución tecnológica.
El auge del streaming
El auge del streaming, liderado por plataformas como Netflix, Amazon Prime y Disney+, ha sido clave para este cambio. Además, el almacenamiento en la nube y los discos duros externos ofrecen opciones más flexibles y accesibles para los usuarios que buscan conservar su contenido multimedia sin depender de formatos físicos.
Con este anuncio, Sony cierra un capítulo en la historia de los formatos físicos, pero abre la puerta a nuevas oportunidades en la era digital. La transición hacia el streaming y el almacenamiento digital parece consolidarse como el estándar para el consumo de contenido en los próximos años.