La situación de la seguridad en el Campo de Gibraltar, un punto caliente del narcotráfico, está marcada por un "incremento de la violencia contra las fuerzas de seguridad", según reconoce el recién nombrado teniente general de la Guardia Civil, Manuel Navarrete.
"Hay una violencia contra las fuerzas de seguridad, eso es innegable"
Navarrete, director del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO), apunta a la mayor presión policial en la zona como uno de los factores que explican este aumento de la violencia. "Los refuerzos que se han hecho a través del plan de investigaciones y de despliegues hacen que sea mucho más frecuente la posibilidad de encontrarse con la Policía, la Guardia Civil o Aduanas en el río Guadalquivir, en Barbate, en Tarifa, o en La Línea", explica.
El asesinato de dos agentes de la Guardia Civil en Barbate en febrero pasado es un triste ejemplo de esta creciente violencia. Navarrete reconoce que estos hechos son "más visibles" y "preocupantes", aunque matiza que el número de incidentes se mantiene estable.
El narcotráfico, un negocio en auge
El narcotráfico sigue siendo el principal motor de la criminalidad en el Campo de Gibraltar. Las redes criminales se han organizado como empresas y buscan controlar toda la cadena de producción y distribución. "Quieren controlar toda la cadena y se han sofisticado mucho más", afirma Navarrete.
La lucha contra el narcotráfico se ha visto reforzada con la incorporación de nuevas tecnologías, como la desencriptación de las plataformas de comunicación tipo EncroChat. Esto ha permitido a las fuerzas de seguridad destapar una dimensión diferente del crimen organizado, con un nivel de impunidad "que antes no se contemplaba".
La Mocro Maffia, una amenaza emergente
Además del narcotráfico, las fuerzas de seguridad están vigilando de cerca la implantación de la Mocro Maffia, una estructura criminal cuyos integrantes son principalmente de origen marroquí y que se asienta en Países Bajos. Aunque su presencia en España todavía es limitada, las autoridades están atentas a sus posibles movimientos.
Navarrete advierte de que la Mocro Maffia ha evolucionado hacia estructuras más potentes y que busca influir en esferas más allá del crimen organizado, como la política. "Lo que más nos preocupa, además del efecto que tiene el crimen organizado, es la corrupción generalizada, de personas, de fuerzas de seguridad, incluso aspirar a algún tipo de corrupción política", señala.
Desafíos para la seguridad
La lucha contra el narcotráfico, el crimen organizado y el terrorismo son los principales desafíos a los que se enfrentan las fuerzas de seguridad en el Campo de Gibraltar. Navarrete destaca la importancia de la cooperación internacional y la coordinación entre los distintos cuerpos policiales para hacer frente a estas amenazas.
El CITCO, dirigido por Navarrete, juega un papel clave en esta coordinación, proporcionando información y análisis a las fuerzas de seguridad y al Ministerio del Interior. "Somos una ayuda, un apoyo a las fuerzas de seguridad del Estado, al servicio de inteligencia y a los jueces y fiscales", explica Navarrete.
A pesar de los desafíos, Navarrete se muestra optimista sobre el futuro de la seguridad en el Campo de Gibraltar. "Hemos conseguido aliviar bastante" la presión del narcotráfico, afirma. "El esfuerzo que se está haciendo se está notando", concluye.