Animales en el metro de Madrid: una cuestión de seguridad y molestia
Los animales son un problema cada vez más común en el metro de Madrid. Según datos internos de la compañía, en los últimos meses se han producido decenas de incidencias relacionadas con la presencia de animales en las instalaciones, desde palomas que se esconden bajo las vías hasta zorros, cigüeñas, halcones, serpientes, loros, patos, gatos, perros, gaviotas, búhos, murciélagos, ratas y urracas.
Estas incidencias pueden provocar retrasos en el servicio, e incluso obligar a interrumpir la circulación de los trenes. Además, los animales pueden suponer un peligro para la seguridad de los pasajeros y trabajadores del metro.
El coste de la gestión de los animales
Hasta ahora, la gestión de los animales en el metro se realizaba de forma gratuita, gracias a la colaboración con organizaciones no gubernamentales, protectoras de animales y el Seprona. Sin embargo, el Gobierno de la Comunidad de Madrid ha adjudicado recientemente a una empresa privada el servicio de captura y gestión de animales en las instalaciones del metro por un importe de 120.643,05 euros para los próximos cuatro años.
Esta decisión ha sido criticada por el PSOE, que denuncia que el coste de la gestión de los animales se ha multiplicado por diez. Además, el partido socialista asegura que la empresa adjudicataria no tiene experiencia en la gestión de animales en entornos urbanos.
Medidas para prevenir la presencia de animales
El metro de Madrid está tomando medidas para prevenir la presencia de animales en sus instalaciones. Entre estas medidas se encuentran:
- Instalación de redes para evitar la entrada de animales.
- Sellado de huecos y grietas.
- Control de la población de palomas.
- Colaboración con organizaciones especializadas en la gestión de animales.
Estas medidas están dando resultados positivos, y el número de incidencias relacionadas con la presencia de animales en el metro ha disminuido en los últimos meses.