La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) en conjunto con las autoridades de la Ciudad de México y el estado de Morelos, arrecian las acciones de vigilancia en el llamado bosque de Agua, con el fin de proteger este vital ecosistema de la tala clandestina y el tráfico ilegal de madera y tierra de monte.

Detenciones y decomisos

En el marco del Convenio de coordinación para Proteger el Bosque de Agua y de la Estrategia Integral y Sistémica para erradicar la tala clandestina, las autoridades han detenido a tres personas involucradas en el transporte ilegal de madera y a una más por transportar tierra de monte.

Además, se han incautado 250 tarimas, dos trozas, 34 polines, 10 tablas y 14 metros cúbicos de tierra. También se han inspeccionado 431 vehículos.

Recorridos de vigilancia y filtros carreteros

Del 14 al 22 de enero, se realizaron recorridos de vigilancia en la zona de Bienes Comunales de San Miguel Topilejo, Tlalpan, y se instalaron filtros carreteros de inspección en esta zona y en los límites entre la Ciudad de México y Morelos.

El 23 de enero, las titulares de la Profepa, Mariana Boy Tamborrell; de la Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México, Julia Álvarez Icaza; y el titular de la Secretaría de Desarrollo Sustentable de Morelos, Alan Dupré, hicieron un recorrido por la zona del bosque de agua en la que colindan el estado de Morelos y la Ciudad de México, para afinar estrategias.

Importancia del bosque de agua

El Bosque de agua es una reserva ecológica fundamental para la recarga de mantos acuíferos y la producción de oxígeno, procesos esenciales para mantener la vida tal como la conocemos.

Además, es el hogar de numerosas comunidades y pueblos que dependen del buen manejo de este bosque para obtener sus medios de vida.

Compromiso de los gobiernos

Las acciones emprendidas por los gobiernos de los tres niveles muestran su compromiso con la protección y conservación de este patrimonio natural.