ONU-DH condena asesinato de Marcelo Pérez, sacerdote con medidas de protección

La Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) ha condenado el asesinato del sacerdote Marcelo Pérez Pérez en San Cristóbal de las Casas, Chiapas.

Antecedentes

El sacerdote contaba con medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) desde 2015 debido a los riesgos que enfrentaba por su labor en defensa de los derechos humanos en Simojovel y otras zonas de Chiapas.

Organizaciones nacionales e internacionales habían advertido previamente sobre el aumento de amenazas y agresiones contra el padre Pérez, que se intensificaron en los últimos años por su trabajo a favor de la justicia y los derechos de los pueblos indígenas.

El asesinato del padre Marcelo Pérez ha sido calificado por Jesús Peña Palacios, Representante Adjunto en México de la ONU-DH, como "absolutamente inaceptable", destacando la amplia labor del sacerdote entre los pueblos indígenas de Chiapas y el reconocimiento internacional de su trabajo.

Investigación y petición de justicia

La ONU-DH ha hecho un llamado a las autoridades a investigar el caso y determinar las responsabilidades.

Por su parte, la Comisión para la Defensa Integral de los Derechos Humanos Comisión de los Derechos Humanos del Estado de Chiapas (CEDH) también ha expresado su rechazo al asesinato del sacerdote y ha urgido a las autoridades a realizar una investigación pronta y expedita.

Homenajes póstumos

Esta mañana se ha oficiado una misa de cuerpo presente en la iglesia de San Andrés Larrainzar, Chiapas, presidida por el cardenal Felipe Arizmendi Esquivel ante cientos de feligreses.

La ceremonia, celebrada tanto en español como en tzotzil, contó con la presencia de Monseñor Rodrigo Aguilar, de la Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez, quien realizó las oraciones en español.

Durante la homilía, acompañada de incienso, veladoras y flores, los indígenas tzotziles hicieron un llamado de paz para los pueblos de Chiapas.

Finalmente, el padre Marcelo Pérez Pérez fue despedido con una danza tradicional típica al finalizar la ceremonia eucarística.