El macabro crimen sacude a Soto del Real

En un trágico suceso, Jorge Ramón D., de 53 años, ha acabado con la vida de su esposa Soledad M.A., de 65, en el municipio madrileño de Soto del Real. La Guardia Civil continúa investigando el asesinato, que ha conmocionado a la comunidad.

La decapitación y el suicidio

El pasado martes 18 de junio, sobre las 15:00 horas, los agentes de la Guardia Civil hallaron los dos cuerpos sin vida en el domicilio de la pareja, ubicado en la calle Vicente Aleixandre número 22. La escena era dantesca: Soledad había sido decapitada y su marido se había suicidado pegándose un tiro con una escopeta.

El perfil del asesino

Jorge Ramón, conocido como 'Walker', era un ex policía municipal de Soto del Real que llevaba al menos dos años sin ejercer. Vecinos del entorno lo describen como un hombre "deportista, amante de las motos y muy metódico". Un accidente de moto en la sierra le había dejado mal de salud y había tenido que prejubilarse.

Misterio en torno a la cabeza

Actualmente, los cadáveres se encuentran en el Instituto de Medicina Legal de Valdebebas, donde se están realizando las correspondientes autopsias. La investigación se centra ahora en encontrar la cabeza de Soledad, que no ha sido hallada en el lugar del crimen. Esta circunstancia ha llevado a la hipótesis de que Jorge Ramón podría haber intentado esconder el cadáver de su mujer.

Conmoción en Soto del Real

El suceso ha causado una honda conmoción en Soto del Real. Los vecinos han expresado su incredulidad y tristeza por el asesinato de su vecina. Este miércoles 19 de junio, se han convocado cinco minutos de silencio en la plaza de la Villa como muestra de condena al crimen machista.

El delegado del Gobierno, Francisco Martín, ha confirmado que se trata del "primer caso de violencia de género en la Comunidad de Madrid en 2024". Soledad no estaba adscrita al programa VioGen para proteger a las mujeres de esta lacra. Desde la Benemérita han informado de que no constaban denuncias previas en la relación.

Este cruel suceso pone de manifiesto la trágica realidad de la violencia machista, un problema que parece no tener fin. La lucha contra esta lacra es responsabilidad de todos y debemos unirnos para erradicarla.