San Pío X, un papa recordado por su humildad y devoción

El nombre Pío, de origen latino, significa 'devoto' y 'piadoso'. En España, 663 hombres celebran su santo gracias a San Pío X, quien fuera el 257° papa de la Iglesia Católica.

De sacerdote a sumo pontífice

Nacido como Giuseppe Melchiorre Sarto el 3 de junio de 1835, San Pío X era hijo de humildes campesinos italianos. A pesar de las limitaciones económicas, sus padres valoraban la educación y lo apoyaron en su vocación religiosa.

Tras su ordenación sacerdotal, Sarto ocupó diversos cargos eclesiásticos, destacando por su celo pastoral y su compromiso con la formación del clero.

La elección papal

El cónclave reunido tras la muerte del papa León XIII en 1903 fue particularmente tenso. El veto del emperador Francisco José I de Austria-Hungría a la candidatura del cardenal Mariano Rampolla del Tindaro, quien contaba con el favor de la mayoría, abrió el camino para la elección de Sarto.

El 4 de agosto de 1903, el cardenal Sarto fue elegido papa y tomó el nombre de Pío X. Su pontificado se caracterizó por una profunda reforma de la Iglesia Católica, orientada hacia la renovación espiritual y la adaptación a los nuevos tiempos.

Un pontificado marcado por la renovación

San Pío X implementó importantes reformas litúrgicas, promovió la comunión frecuente y alentó la participación activa de los laicos en la vida de la Iglesia. También condenó el modernismo, una corriente teológica que cuestionaba algunos dogmas y principios católicos.

Su preocupación por la educación lo llevó a establecer la Pontificia Universidad Gregoriana y el Instituto Bíblico Pontificio. Además, canonizó a varios santos, entre ellos a Juana de Arco y a Domingo Savio.

Legado y canonización

San Pío X falleció en Roma el 20 de agosto de 1914. Fue canonizado por el papa Pío XII en 1954 y su fiesta se celebra el 21 de agosto.

Su legado como pastor y reformador de la Iglesia Católica continúa inspirando a los fieles hoy en día. Su humildad, devoción y compromiso con la verdad siguen siendo un ejemplo para los cristianos de todo el mundo.