Un aspirante a magistrado en Sonora bajo sospecha
En medio de la efervescencia de las primeras elecciones para el Poder Judicial en México, una candidatura en Sonora está generando controversia y profunda preocupación. Andrés Montoya García, abogado y aspirante a magistrado, se encuentra en el ojo del huracán, señalado por su presunta vinculación con la desaparición del periodista Alfredo Jiménez Mota, ocurrida en 2005. Esta situación plantea serias interrogantes sobre la idoneidad de Montoya García para ocupar un cargo en el sistema judicial.
El periodista desaparecido y sus investigaciones
La última reunión y las sospechas sobre Andrés Montoya García
Las investigaciones revelan que la última persona que vio a Jiménez Mota fue Andrés Montoya García, quien en ese entonces se desempeñaba como subdirector general del sistema penitenciario de Sonora. Según la Sociedad Interamericana de Prensa, Montoya García confirmó haber sostenido un encuentro con el periodista esa noche, en el que conversaron sobre la liberación de un presunto narcotraficante apodado «El Estudiante». Sin embargo, su coartada se vio comprometida por las investigaciones de las autoridades.
La impunidad y la falta de avances en la investigación
A pesar de los señalamientos contra los hermanos Montoya García, no existen registros oficiales de que Andrés Montoya García haya sido investigado por la desaparición de Jiménez Mota. En diciembre de 2021, el gobierno mexicano, a través del entonces subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, ofreció una disculpa pública por la desaparición del periodista, reconociendo que se trató de un crimen de Estado. No obstante, hasta el momento, la Fiscalía General de la República no ha señalado a nadie como responsable y no ha informado a los padres de Jiménez Mota sobre avances en el caso.
La periodista sonorense Shaila Rosagel, amiga de Jiménez Mota, preguntó a la presidenta Claudia Sheinbaum sobre el estado de la investigación, a lo que la mandataria se comprometió a preguntar al fiscal Alejandro Gertz Manero. Sin embargo, tras 20 años sin culpables ni detenidos, la falta de avances en el caso genera indignación y frustración.
El crimen organizado y su influencia en el Poder Judicial
Los grupos criminales que investigaba Jiménez Mota hace 20 años siguen operando en Sonora y buscarían expandir su influencia en el estado a través de candidatos afines en la elección al Poder Judicial. Los Salazar, por ejemplo, se han afianzado en la ruta migrante que conecta al Desierto de Sonora con Arizona y han forjado una alianza con ‘Los Chapitos’, los hijos de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán. Otros grupos delictivos, como el Cártel Jalisco Nueva Generación, el Nuevo Cártel Independiente de Sonora y el Cártel de Caborca, también tendrían interés en influir en la elección de jueces y magistrados.
La organización México Evalúa ha ubicado a Sonora como un estado con un nivel de riesgo «medio» en violencia político-criminal en estas elecciones judiciales. Miguel Alfonso Meza, presidente de Defensorxs, alerta sobre el riesgo de que los intereses del crimen organizado se filtren en la elección, no solo a través de candidatos con vínculos oscuros, sino también a través de acuerdos con grupos de poder en territorios donde el crimen organizado tiene la capacidad de movilizar a su base social y convertirla en estructura electoral.