El discurso del embajador estadounidense, Marc Stanley, en la celebración del Día de la Independencia de Estados Unidos

En su discurso, Stanley destacó la larga historia de colaboración y respeto mutuo entre Argentina y Estados Unidos, y celebró el tercer siglo de relaciones bilaterales.

Stanley también se refirió a la situación actual de Argentina, y destacó el "coraje" del presidente Javier Milei para enfrentar los desafíos que atraviesa el país.

El embajador concluyó su discurso con un brindis por Estados Unidos, Argentina, Messi y la amistad entre ambos países.

La tensión del mercado de cambios, tema destacado en el cóctel

Como es habitual, el evento fue multitudinario: concurrieron más de 1.500 personas. El epicentro del encuentro se situó inicialmente en el hall central del primer piso del palacio, donde Stanley y su esposa Wendy, recibieron y se fotografiaron con los invitados.

Como no podía ser de otra forma, las tensiones por las que atraviesa el mercado de cambios fue uno de los temas más destacados.

Algunos economistas creen que el Gobierno debe mantener su política, mientras que otros opinan que es conveniente hacer una devaluación del orden del 10%, como la sugerida por Domingo Cavallo, ya que, consideran la conducción oficial mantiene credibilidad.

Representantes libertarios y empresarios, presentes en el cóctel

A diferencia de lo que sucedió durante los gobiernos del kirchnerismo, fue muy importante la presencia de los representantes libertarios.

También concurrió el ex jefe de Gabinete, Nicolás Posse. "Sigo apoyando este proyecto, sigo siendo amigo de Javier y hay un muy buen equipo" dijo brevemente a la prensa, al tiempo que se excusaba de dar más declaraciones.

La presencia empresaria fue nutrida. Entre ellos Eduardo Elsztain, presidente de IRSA y los titulares de la Sociedad Rural Argentina, Nicolás Pino, y de la Unión Industrial Argentina, Daniel Funes de Rioja.

Una de las notas de color la dio el empresario Guillermo Coppola. El representante y amigo de Diego Maradona casi no pudo comer por la cantidad de pedidos de selfies que recibió de los asistentes.