El Senado español se ha convertido en el escenario de una cumbre internacional ultraderechista centrada en el rechazo al aborto y la agenda feminista. El evento, organizado por la Red Política de Valores (PNfV), ha reunido a figuras de diferentes corrientes de la derecha europea, desde extrema derecha a moderada.

PONENTES DE LA CUMBRE

El eje principal de la cumbre es el rechazo al aborto, incluso en casos de violación. Entre los ponentes se encuentran líderes ultraderechistas como José Antonio Kast (Chile), quien considera el aborto como "asesinato de niños". Otros ponentes defienden las terapias de conversión para homosexuales.

EXTREMA DERECHA EUROPEA

El grupo más representado es Conservadores y Reformistas (ERC), liderado por Giorgia Meloni. También participan exponentes de Patriotas por Europa (Patriots), el grupo del húngaro Viktor Orbán y la francesa Marine Le Pen.

DERECHA MODERADA

El Partido Popular Europeo (PPE) también tiene presencia en la cumbre con dos ponentes: Gudrun Kugler (Austria) y Javier Puente (España). Javier Puente, además de ser ponente, es alto cargo del Gobierno de Cantabria y miembro del consejo asesor de PNfV.

OTROS PONENTES

La cumbre también cuenta con ponentes de otros países, como Estados Unidos, Argentina y Brasil. Entre ellos destacan:

La presencia de Javier Puente como ponente y anfitrión ha generado polémica, ya que es un miembro del Partido Popular, que actualmente gobierna España. El PP ha declarado que no envió a Puente y que respeta todas las opiniones, aunque no las comparta.

INFLUENCIA HÚNGARA

La influencia del primer ministro húngaro, Viktor Orbán, es notable en la cumbre. Hay varios ponentes vinculados al Centro de Derechos Fundamentales, un laboratorio de ideas aliado del Fidesz, el partido de Orbán.

Según Neil Datta, director del Foro Parlamentario Europeo sobre Derechos Sexuales y Reproductivos, la Red Política de Valores es ahora un instrumento de la diplomacia blanda húngara. Esta cumbre, junto con el préstamo a Vox de 9,2 millones de euros por un banco húngaro y el nombramiento de Santiago Abascal como presidente de Patriots, son indicios de la creciente influencia húngara en España.

CRÍTICAS A LA CUMBRE

La cumbre ha sido criticada por grupos de izquierda, feministas y LGTBIQ+. Argumentan que promueve el discurso de odio y la discriminación, y que no debería haber tenido lugar en el Senado.

El PSOE, que forma parte de la Mesa del Senado, ha pedido la suspensión de la cumbre. Sin embargo, la Mesa ha rechazado la petición, alegando que PNfV cumple los requisitos para una cesión de sala.

El rechazo al aborto y la agenda feminista es el nexo común de los asistentes a la cumbre. Sin embargo, también hay diferencias entre los participantes, especialmente en cuestiones como la democracia liberal o la relación con Rusia.

Según Neil Datta, los participantes entienden que deben dejar de lado sus divisiones para lograr avances en sus objetivos conservadores sobre género y sexualidad.