El descubrimiento casual de un ecosistema prehistórico de 280 millones de años en los Alpes italianos está arrojando luz sobre la vida en un momento de rápido calentamiento global. En 2023, la excursionista Claudia Steffensen tropezó con huellas fosilizadas mientras caminaba por el Parque de las Montañas Orobie Valtellina, en Lombardía. El análisis de expertos reveló que las huellas pertenecían a un reptil prehistórico, lo que llevó a una investigación más profunda.
Un ecosistema completo
Los investigadores visitaron el sitio repetidamente y desenterraron evidencia de un ecosistema completo de la era Pérmica, un período caracterizado por un rápido calentamiento global. El ecosistema incluye huellas fosilizadas de reptiles, anfibios, insectos y artrópodos, así como fósiles de semillas, hojas y tallos. También se encontraron impresiones de gotas de lluvia y ondas de un antiguo lago.
Detalles impresionantes
Las huellas, preservadas en arenisca de grano fino, muestran detalles impresionantes, como marcas de garras y patrones del vientre de los animales. Entre las huellas, se identificaron rastros de al menos cinco especies animales, algunas tan grandes como los actuales dragones de Komodo, con tamaños de entre 2 y 3 metros.
Consecuencias del cambio climático
Muchos de los fósiles salieron a la luz debido al derretimiento acelerado de hielo y nieve en los Alpes, consecuencia del cambio climático. Estos fósiles atestiguan un período geológico distante, pero con un calentamiento global muy similar al actual, advierten los investigadores.
El descubrimiento de este ecosistema prehistórico proporciona información valiosa sobre la vida en la Tierra hace millones de años y destaca la importancia de proteger nuestro planeta del cambio climático.