En el corazón del Parque Nacional Sierra de las Nieves, en Málaga, la Guardia Civil ha desmantelado una plantación ilegal de marihuana que se regaba, irónicamente, con agua captada de forma ilegal del río Verde.

Un cultivo oculto y sofisticado

Oculto en una zona de difícil acceso, este cultivo de 5.000 metros cuadrados estaba cuidadosamente diseñado para pasar desapercibido. Los responsables habían construido una sofisticada infraestructura, incluida una balsa de 6.000 litros de capacidad para regar las plantas y una estructura artesanal para secarlas.

La plantación estaba dividida en dos áreas: una dedicada al cultivo, con 6.500 ejemplares de marihuana, y otra para el procesamiento, donde se cortaban y secaban las plantas.

Detención y riesgos de incendio

Un ciudadano rumano armado protegía el recinto, pero fue detenido por la Guardia Civil. Se le imputó un delito contra la salud pública y otro de tenencia ilícita de armas.

El desmantelamiento de la plantación fue una tarea ardua debido a su difícil ubicación. Fue necesaria la intervención de un helicóptero, un grupo de rescate de montaña y bomberos forestales, quienes limpiaron la zona para reducir el riesgo de incendio.

Un problema creciente

Este desmantelamiento pone de manifiesto un problema creciente en Málaga y otras zonas rurales: el cultivo ilegal de cannabis. Las organizaciones criminales se aprovechan de la naturaleza boscosa y la proximidad a ríos y arroyos para establecer sus plantaciones.

La lucha contra el cultivo ilegal de cannabis continúa siendo una prioridad para las fuerzas del orden, ya que representa un riesgo para la salud pública, el medio ambiente y la seguridad ciudadana.