El Ayuntamiento de Valladolid pretende cambiar los puntos de medición para permitir el baño en el Pisuerga

El Consistorio, con el apoyo del PP y Vox, quiere trasladar los puntos de medición de la calidad del agua del río Pisuerga para poder autorizar el baño en su playa fluvial de Las Moreras. Esta medida se produce después de que los índices de contaminación lleven cinco años desaconsejando los chapuzones en el río.

El consejero autonómico de Sanidad, Alejandro Fernández, ha admitido la voluntad del Ayuntamiento de desplazar los puntos de medición, pero ha señalado que aún no se ha decidido dónde se ubicarán. La playa tiene varias zonas, una cercana a una cascada donde el agua corre más y acumula menos residuos, y otra más tranquila junto a la arena, propensa a albergar más contaminación o restos fecales de ocas.

El PSOE, en la oposición tras ocho años de gobierno junto a Valladolid Toma La Palabra, ha acusado a la Junta y al Consistorio de tacticismo político. El exalcalde y ahora ministro de Transportes, Óscar Puente, ha criticado que se haya "privado del baño a la ciudadanía de Valladolid por puro sectarismo". Su sucesor, Jesús Julio Carnero (PP), ha negado que haya "cuestiones raras" y ha destacado que sus predecesores se quejaron de la prohibición del baño sin solicitar el cambio de los puntos de medición.

Criterios de la Junta

La Junta de Castilla y León se remite a la normativa nacional para justificar sus criterios de calidad del agua. Sin embargo, portavoces de Ecologistas en Acción en Valladolid señalan que los niveles de bacterias Escherichia coli y enterococo intestinal permitidos por la legislación de Castilla y León son mucho más altos que los consentidos en otras comunidades autónomas, como Madrid o Castilla-La Mancha.

La propia exposición de motivos de la orden autonómica sobre la calidad de las aguas de baño reconoce el vacío legal nacional, ya que no se establecen límites concretos para estas bacterias.

Cese de la jefa de Sanidad Ambiental de la Junta

La polémica sobre la calidad del agua del Pisuerga ha llevado al cese de la jefa de servicio de Sanidad Ambiental de la Junta, Isabel García. Su dimisión se ha justificado como una cuestión de "confianza" con la Dirección General de Salud Pública.

Opiniones de los bañistas

Pese a la prohibición del baño, algunos vallisoletanos siguen refrescándose en el Pisuerga cuando las temperaturas suben. Dos amigas jubiladas, Maribel y Ana, reconocen que el agua "tiene pinta hasta de oler", pero aseguran que no se han metido nunca en el río. Otras personas, como el pescador Gabriel Mateo, sí que se bañan en el Pisuerga, aunque reconocen que lo hacen "solo cuando nos caemos".

Las turistas estadounidenses Eoifi Nishe e Irelyn, que visitan Valladolid, se asombran al saber que mucha gente se baña en el Pisuerga. Ellas prefieren tomar el sol y disfrutar del ambiente de la playa fluvial.