El futuro de la educación, en debate: celulares, Inteligencia Artificial, aprendizaje y economía

En la tercera y última jornada del XXII Encuentro Federal de la Junta Coordinadora de Asociaciones Nacionales y Provinciales de la Enseñanza Privada de la República Argentina (COORDIEP) se habló de los desafíos de la tecnología, los nuevos métodos de enseñanza, la economía que se viene y hasta de técnicas de respiración para afrontar momentos de estrés.

Los celulares en el aula: ¿hay que prohibirlos o usarlos en clase?

Uno de los desafíos vigentes es entender cómo actúan las personas frente a estos avances. “La tecnofobia nos saca trabajo, mientras que la tecnofilia ayuda a conseguirlo”, advirtió Melina Masnatta, autora, experta en tecnología educativa, emprendedora, consultora en inteligencia artificial, innovación y docencia. Y como era de esperarse, Masnatta se refirió a los celulares en el aula.

De hecho, reveló que las aplicaciones educativas son la tercera categoría más descargada después de los juegos y las apps de negocios. “En el mundo tecnológico siempre decimos mejor pedir perdón que permiso, y eso no está bien. Es como decir vamos a aplastar todo, después lo reconstruimos. Está todo roto, hay que seguir rompiéndolo, no importa nada. Creo que el uso de celulares hay que regularlo, pero eso no se regula prohibiendo, no hay que regular (por norma o ley), porque la realidad es que hoy en el aula es el único momento y espacio en que podemos debatir sobre esto. No hay que prohibir, hay que abordar”, subrayó.

La Inteligencia Artificial en la educación

Entre las prioridades de la Inteligencia Artificial (IA) en la educación, aparecen la necesidad de aportar más transparencia en los sesgos y limitaciones de aprendizaje; el consentimiento informado sobre el uso de datos e impacto de las interacciones; ser más precisos con la seguridad y privacidad; evitar el Humano en loop (enajenado con la tecnología), y crear comunidades de prácticas, manifiestos, acuerdos y revisiones, que no son otra cosa que los Laboratorios y equipos de experimentación.

"Por su puesto que no, decir eso es irresponsable", recalcó la especialista. Sin embargo, la IA obliga a reinventar la planificación y evaluación educativa. En ese sentido, recomendó el uso de la IA como aliada en el diseño de modelos predictivos, la apropiación de conceptos, con más compromiso en la experiencia. Además, propuso incluir la diversidad al momento de aprender.

Sobre las experiencias contó un trabajo realizado en una escuela de la localidad de Campana, donde docentes y alumnos utilizaron IA para hacer modelos predictivos sobre quién ganaría las elecciones en 2023, la final de la Champions League y sobre los temas que les interesaban estudiar a los jóvenes. “Hoy la escuela también debe ser una experiencia”, indicó, en clara referencia a lo que desean vivir los estudiantes.

"Educar molesta, incomoda, y tiene que ver con trascender"

Boris Mir, consultor internacional en transformación educativa, presentó innovadoras estrategias de aprendizaje a partir de un objetivo: cómo “aprender profundo”. Su premisa es muy simple: “Los chicos en el aula interpretan lo que quieren, no lo que dicen los maestros. Lo más importante para aprender es lo que ya sabemos”.

Para Boris Mir es clave involucrar a los estudiantes en todo el proceso de aprendizaje. “Los chicos saben cómo aprender, hay que dejar de controlar las clases. Con este círculo (perce-evo-restitu), el aprendizaje lo manejan ellos. Enseñar es crear las condiciones para que el mensaje sea posible y para todos”, enfatizó.

La economía que se viene

En la última jornada de charlas de la COORDIEP también participó el economista Fausto Sportorno. Según el analista de la consultora Orlando Ferreres, la economía que se viene estará marcada por el contexto internacional e interno. En el plano mundial celebró el recorte de 50 puntos básicos de la tasa de interés de Estados Unidos porque hace a los países emergentes más atractivos, pero lamentó la abrupta caída de los precios de los commodities y el abultado stock de soja que afecta las exportaciones argentinas.

En el plano local, Spotorno describió que el Gobierno ingresó a la tercera fase de lo que sería un plan económico no oficializado, tras realizar el ajuste fiscal en primer lugar y ordenar la hoja de balance del Banco Central con un freno a la emisión monetaria. Ahora, dijo, se pasó al tercer paso que sería remover los controles de capitales, que no es otra cosa que levantar el cepo al dólar.

“Esperamos que esto ocurra a fin de año, en noviembre o diciembre. Las condiciones están dadas, a más tardar sería en enero, febrero o a los sumo marzo”, estimó el experto. La otra parte de la fase tres es comenzar a acumular más reservas, reducir la brecha de los tipos de cambio y la inflación.

El economista le dijo a los educadores que si se levanta el cepo el tipo de cambio oficial se podría ir a $1.300, con tendencia a la baja y no a la suba, y un límite que rondaría los u$s100.000. Los dólares libres (CCL) irían a $1.447.

“Entre $1.100 y $1.400 el tipo de cambio es razonable para la Argentina. Sería muy raro que si se levanta el cepo se vaya a $1.700”, afirmó.

Además, proyectó que la inflación mensual rondará entre 3% y 3,5% mensual hasta fin de año, con una estimación anual al cierre del 2024 del 120%. Pero Spotorno también reveló un un escenario más optimista para el Gobierno. "¿Qué puede salir bien? Que los numerosos sean mejores, que el gobierno logre salir del cepo como dice el Presidente con el tipo de cambio de $1.100, o sea, con efectos mínimos, que la inflación se baje más rápido, al 1% mensual hasta fin de año, que es lo que tiene el Presupuesto, y que el año que viene tengamos una inflación del 18% y un crecimiento posiblemente más alto, cerca del 5%", describió.