La Iglesia Católica sostiene que el obispo Salvador Rangel fue víctima de secuestro exprés
La Iglesia Católica insiste en que el obispo emérito de Cuernavaca, Salvador Rangel, fue víctima de un secuestro exprés luego de su desaparición el pasado 27 de abril en Morelos. Dos días después, fue localizado en un hospital bajo los efectos de estupefacientes que le impedían reaccionar a su alrededor.
Amenazas previas y mediación de paz
Previo a su desaparición, el obispo Rangel había recibido amenazas de muerte. Además, había logrado mediar un acuerdo de paz entre grupos criminales de Guerrero, como Los Ardillos y Los Tlacos.
Elementos que apuntan a un secuestro exprés
Monseñor Ramón Castro, secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), afirma que existen elementos en la desaparición del obispo Rangel que indican un secuestro exprés. La Fiscalía de Morelos también lo respalda, según afirmó en una entrevista con Ciro Gómez Leyva.
El secretario general de la CEM menciona que ha conversado con un penalista que reafirma esta hipótesis. Entre los elementos señalados están el robo de pertenencias del obispo, como tarjetas, dinero y su automóvil, lo cual es común en secuestros.
Especulación y reacciones
Castro lamenta que se haya especulado sobre la posibilidad de que el obispo Rangel se hubiera ausentado por voluntad propia y que fuera hallado en un hotel. Considera que es triste que se haya utilizado políticamente este hecho.
Agrega que las instituciones estarían molestas con el obispo Rangel porque "proclama y dice la verdad". Tras estos acontecimientos, han sido atacados en redes sociales con campañas de desinformación.
Declaraciones del obispo Rangel
En un comunicado publicado en internet, el obispo Rangel aseguró que perdona a sus agresores y a quienes han manejado información errónea sobre su caso. También declaró que no denunciará.
Amenazas latentes
Ramón Castro interpreta que estas declaraciones podrían indicar que el obispo Rangel se siente amenazado. A pesar de encontrarse bien con su familia, no cuenta con ningún dispositivo de seguridad.
La Iglesia Católica exige a las autoridades que investiguen este caso a fondo y garanticen la seguridad del obispo Rangel.